(actualiza con declaraciones de Scholz a los medios)
Pekín, 16 abr (EFE).- El canciller alemán, Olaf Scholz, ha pedido este martes al presidente chino, Xi Jingping, que use su influencia sobre Moscú para poner fin a la guerra de Rusia en Ucrania, y ha reiterado la necesidad de que se evite el envío de bienes de doble uso miliar y civil a la Federación Rusa.
"La palabra de China tiene peso en Rusia. Le he pedido por ello al presidente Xi que ejerza influencia sobre Rusia para que (el presidente ruso, Vladímir) Putin interrumpa de una vez su demente cruzada, retire sus tropas y ponga fin a esta guerra terrible", afirmó el canciller en su cuenta de la red social X.
En declaraciones posteriores a los medios tras concluir su visita de tres días a China, Scholz explicó que no puede ser que esta "terrible guerra, que no tiene justificación, continúe con la misma brutalidad que cuando comenzó" hace 783 días.
"Es importante que apoyemos a Ucrania tan intensamente y durante tanto tiempo como sea necesario. Y al mismo tiempo que avancemos en los esfuerzos diplomáticos (...)", recalcó el canciller alemán.
Esto incluye, dijo, procesos de diálogo como los que ya han tenido lugar en Copenhague, La Valetta y Davos según la Fórmula de Paz propuesta por el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y los que habrá en un futuro, como la conferencia en junio en Suiza.
Pese a que Xi le dijo que solo apoyaba una conferencia que esté apoyada tanto por Ucrania como por Rusia, lo que no es el caso hasta ahora en Moscú, que rechaza la Fórmula de Paz de Kiev, Scholz se mostró confiado en que en Pekín "se han sentado unas bases que contribuirán a que ahora se hable también de cuestiones que hay que impulsar a nivel diplomático".
"Es necesario que, además del apoyo militar a Ucrania, haya un proceso en el que debemos avanzar", enfatizó.
"China alienta todos los esfuerzos que conduzcan a una resolución pacífica de la crisis, y apoya que se convoque de manera oportuna una conferencia internacional de paz reconocida por Rusia y Ucrania con la participación de todas las partes", afirmó Xi ante Scholz.
El canciller alemán dijo a los medios que para poner fin a la guerra también era importante para él dejar claro en China que "existe una exigencia urgente de que no se suministren armas a Rusia", en referencia a los bienes que tienen un doble uso, tanto militar como civil y que permiten a Moscú seguir alimentando la industria de defensa y por tanto su máquina bélica en Ucrania.
Scholz y Xi también abordaron las tensiones en Oriente Medio derivadas "del terrible ataque de (el grupo islamista palestino) Hamás contra Israel" el 7 de octubre pasado y las perspectivas de una solución.
"La postura alemana es muy clara: queremos lograr un alto el fuego y la liberación de rehenes. Esto debe ocurrir lo antes posible", recalcó el canciller alemán, quien indicó que, tras el ataque "sin precedentes" de Irán contra Israel del pasado sábado, "es muy importante que no haya una mayor escalada" en Oriente Medio.
Por otra parte, los dos mandatarios abordaron temas económicos, como la igualdad de condiciones para las empresas alemanas en China.
Scholz, que viajó con tres ministros a China y una delegación de empresarios y que también participó con el primer ministro, Li Qiang, en consultas del Comité Asesor Económico sino-alemán, recalcó que en este asunto se trató el tema de las subvenciones chinas a sus productos y empresas, cuestiones relacionadas con la propiedad intelectual y la participación de compañías germanas en licitaciones.
Indicó que es importante que los procesos para presentarse a licitaciones no pueden ser más complicados para las empresas alemanas y europeas que para las chinas.
El canciller alemán sostuvo que en su viaje a China, que también le llevó a Shanghái y a la ciudad central china de Chongqing, encontró "un ambiente pragmático" en sus socios asiáticos a la hora de abordar estos asuntos.
El viaje se produjo además cuando la Comisión Europea (CE) investiga los subsidios a los automóviles eléctricos chino, en el marco del cual sobrevuelan posibles aranceles el debate en Europa, contra los que Scholz ya se ha pronunciado.
Durante el viaje, el ministro alemán para temas Digitales y Transporte, Volker Wissing, firmó con su homólogo chino, Jin Zhuanglong, un memorando de intenciones sobre el diálogo y la cooperación en el campo del transporte automatizado.
A su vez, la ministra de Medio Ambiente, Steffi Lemke, y el director Nacional de Desarrollo y Reformas de China, Zheng Shanjie, firmaron un plan de acción para iniciar un diálogo estratégico sobre la economía circular y la eficiencia de los recursos.