Jerusalén/Cairo, 11 abr (EFE).- El Ejercitó israelí inició este jueves una ofensiva terrestre, respaldada por fuerzas aéreas y navales, en el campamento de refugiados de Nuseirat, en el centro de la Franja de Gaza, al mismo tiempo que el grupo islamista Hamás trabaja en una contraoferta para un acuerdo de tregua, tras rechazar la mayoría de las demandas israelíes recogidas en el último borrador.
Los ataques persisten desde esta madrugada en Nuseirat, donde murieron de madrugada al menos cinco personas en un bombardeo israelí contra un colegio y un edificio residencial; y también en la devastada ciudad de Gaza, donde al menos seis personas fallecieron en un ataque contra el mercado de Firas.
"Tanques militares se infiltraron en la parte norte de Nuseirat, apoyados por los ataques aéreos de helicópteros de combate", según la agencia palestina Wafa. Los vehículos destruyeron un gran número de edificios residenciales en la zona de Zahra.
La fuerza israelí naval también atacó "casas de civiles" en el campamento costero de refugiados de Al Shati, al oeste de la ciudad de Gaza, según reportaron fuentes locales, lo que causó un número indeterminado de víctimas en esta y otras áreas de la urbe norteña.
El Ejército de Israel confirmó haber realizado esta noche "una operación precisa" terrestre, basada en información de los servicios de Inteligencia, en el campamento de Nuseirat, donde según un comunicado milicianos e infraestructura de Hamás fueron abatidos.
"Antes de la entrada de las tropas al área, aviones de combate de la Fuerzas Aéreas de Israel y aviones adicionales atacaron infraestructura terrorista sobre y bajo tierra en el centro de la Franja de Gaza", detalló en el texto.
También confirmó ataques "selectivos a lo largo de la costa" del campamento de Al Shati, con el objetivo de "ayudar a las tropas terrestres que operaban en la zona".
En total, en las últimas 24 horas, al menos 63 personas murieron en Gaza, lo que eleva la cifra total de víctimas mortales a 33.545 fallecidos desde el comienzo de la guerra.
Por su parte, la agencia de la ONU para la protección de la infancia, Unicef, denunció este jueves que uno de sus camiones fue atacado en el punto de espera designado para los convoyes de ayuda mientras esperaba para cruzar el control militar israelí en Wadi Gaza, de camino al norte del enclave. Ninguno de sus trabajadores resultó herido.
"Era un vehículo blindado, estaba claramente identificado como un vehículo de la ONU, y estábamos en una zona donde se nos había dicho que esperásemos", dijo a EFE Tess Ingram, portavoz de la organización, que estaba en el interior del camión cuando recibió los disparos.
Fuera del enclave palestino, las conversaciones para un posible acuerdo de tregua continúan, si bien Hamás podría no volver a la mesa de negociaciones en El Cairo, según informaron este jueves a EFE fuentes palestinas conocedoras de las conversaciones.
El grupo sí que estaría elaborando un nuevo documento para los mediadores egipcios y cataríes con una contraoferta, después de rechazar una propuesta, promovida por Estados Unidos, que permitiría la liberación de 40 rehenes en Gaza a cambio de un alto el fuego temporal de al menos seis semanas y la liberación de unos 900 presos palestinos.
Las fuentes palestinas no detallaron nada sobre los 40 rehenes israelíes en manos de Hamás que formarían parte del canje. Pero la cadena estadounidense CNN -citando a una fuente israelí y a otra cercana a las conversaciones- señaló que Hamás dice no poder identificar y localizar a 40 rehenes entre los 133 que siguen cautivos (muchos de los cuales podrían estar muertos).
"No puede ser que estén pasando por un infierno allí (en Gaza) sólo para morir en cautiverio. Tiene que haber esperanza. ¿Se les concederá la libertad que tan cruelmente les han quitado?", rogó hoy Ofri Bibas Levy, hermana de Yarden Bibas -quien sigue secuestrado junto a su mujer y dos hijos- en un evento en el kibutz de Nir Oz, atacado por Hamás el 7 de octubre.
Las cuatro demandas que Hamás pide desde hace meses, según fuentes palestinas, son un alto el fuego definitivo, la retirada integral de las fuerzas israelíes de Gaza, la entrada de ayuda humanitaria y el regreso de los desplazados al norte, y que se complete un intercambio de prisioneros por fases para garantizar una liberación "proporcionada".