Ciudad de Panamá, 10 abr (EFE).- Familiares de ministros, diputados y hasta del presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, así como de empresarios, aparecen en una lista publicada por la prensa como beneficiarios de los auxilios económicos estudiantiles que otorga un ente público, lo que ha generado una ola de indignación y reavivado las denuncias de tráfico de influencia y corrupción en la administración del Estado.
Este escándalo por los llamados 'auxilios económicos' que otorga el Instituto para la Formación y el Aprovechamiento de Recursos Humanos (Ifarhu) estalló años atrás y revive ahora con la publicación el martes por el diario La Prensa de una base de datos interactiva, armada por el propio rotativo, en la que se identifican 2.144 beneficiarios que recibieron en total 141,6 millones de dólares.
"No son todos: hay otros 2.759 desembolsos cuyo beneficiario se mantiene en secreto", indica el rotativo, que recuerda que se está ante la adjudicación "discrecional" de recursos "no reembolsables" a estudiantes a los que no se exige "mantener un promedio académico alto, ni participar en alguna disciplina deportiva, ni destacar en actividades culturales", como sí se pide para obtener otras becas del Ifarhu.
Los expuestos en la lista son los beneficiarios y los montos, algunos de hasta 200.000 dólares, repartidos entre el 7 de julio de 2019 y el 24 de mayo de 2023, según la base de datos de La Prensa, una información que el Ifarhu se negó a difundir y que la Contraloría General declaró como "reservada", destaca el rotativo.
Entre los adjudicatarios de los fondos, que en este caso se entregaron para sufragar estudios superiores, están hijos y otros familiares de ministros, ministros consejeros, diputados, incluso una sobrina de Cortizo, y hasta de poderosos empresarios nacionales, de acuerdo con la información del rotativo.
Las expresiones de repudio se multiplican en las redes sociales y en los programas de opinión en Panamá, en el entendido que estos auxilios, en teoría, están destinados a estudiantes de todos los niveles sin capacidad económica. "Patada al pueblo", "maleantes", "robo", son palabras que se repiten en la discusión.
"Es indignante", dijo este miércoles a EFE el abogado constitucionalista y candidato independiente a diputado Ernesto Cedeño, que tildó además de "vergonzoso" que este asunto "no se haya investigado penalmente" a la luz de que los entes contralores "no realizaron su función".
Se trata del "manejo del Código de Ética. Tú no puedes manejar los fondos públicos para beneficio de algunas personas", recalcó el aspirante a un asiento en la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), de 71 escaños.
La Autoridad Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (Antai) dijo en 2023 que los funcionarios del Ifarhu, incluido su entonces director Bernardo Meneses, no incurrieron en irregularidades administrativas o faltas al Código de Ética, pero recomendó reglamentar el programa de los auxilios financieros.
"Si faltaban, como dijo la Antai, procedimientos, él (Meneses) no debió" aprobar los auxilios "hasta que se establecieran" estos en un reglamento, dijo Cedeño, que pidió a la Fiscalía abrir un proceso penal.
Meneses es ahora candidato a diputado por el gobernante Partido Revolucionario Democrático (PRD) de cara a los comicios generales del próximo 5 de mayo.
Cedeño también recordó que ante el escándalo, el Ministerio de Educación dijo en octubre de 2022 que se estudiaba la posibilidad de convertir los auxilios otorgados a los allegados del poder en préstamos estudiantes, "pero mentira, no se ha hecho absolutamente nada", añadió.
Lo primero que se tiene que hacer, sostuvo Cedeño, "es transformar eso en crédito y llevara a los responsables a una investigación penal por el uso discrecional de los recursos del Estado".
"Miles de personas siguen pagando sus préstamos del IFARHU después de tantos años. Otros eligieron el tráfico de influencias. La única manera de acabar con eso es eligiendo gente que NO que rodee de MALEANTES", expresó en sus redes sociales el diputado y candidato independiente a la Alcaldía de Panamá, Edison Broce.