Tokio, 7 mar (EFE).- La compañía eléctrica Tokyo Electric Power (TEPCO), operadora de la accidentada central atómica de Fukushima, aseguró este jueves que la reciente fuga de agua radiactiva dentro de la misma "no ha tenido ningún efecto en el exterior".
"Se ha procedido a eliminar el charco de agua filtrada y el terreno que este agua haya podido tocar y la investigación ha mostrado que no se ha producido una fluctuación significativa", dijo hoy un portavoz de la compañía en una rueda de prensa.
Las declaraciones se producen después de que el pasado 7 de febrero un trabajador encontrara agua contaminada filtrándose desde unas conducciones dentro del recinto nuclear.
La fuga, que equivaldría a unos 15 metros cúbicos o 5,5 toneladas, se produjo debido a que una válvula permaneció abierta de forma errónea durante una operación de trasvase de agua contaminada llevada a cabo por los trabajadores de la planta, según explicó TEPCO.
Se calcula que el líquido vertido podía contener hasta 220 veces el nivel máximo de materiales radiactivos como el cesio-137 fijado por las autoridades niponas.
La compañía apuntó este jueves a que tomará medidas para evitar que otro error humano se vuelva a producir, como por ejemplo, asegurarse de que los trabajadores comprenden todos los procedimientos de seguridad y comprobar las condiciones de los edificios para asegurarse de que una filtración no se pueda trasladar nunca al exterior.
El incidente se produjo un mes antes del 13 aniversario del terremoto y tsunami del 11 de marzo que ocasionó el desastre nuclear y mientras el país asiático comenzó el pasado agosto a descargar en el Pacífico grandes cantidades de agua procesada que se generan y almacenan en sus instalaciones, una medida que está siendo supervisada por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Este agua es tratada mediante un complejo sistema de filtrado que elimina la mayor parte de los elementos radiactivos nocivos, menos el tritio (un isótopo nuclear presente en la naturaleza), antes de su almacenamiento en tanques para ser vertida.
Actualmente hay más de 1.000 tanques en los terrenos de la planta y se espera que su vertido, que ha despertado fuertes protestas de la vecina China y del sector pesquero nipón, se prolongue al menos durante unos 30 años. ´