Los Ángeles (EE.UU.), 4 mar (EFE).- El gobernador de California, Gavin Newsom, está llamado a ser uno de los referentes del Partido Demócrata en el futuro pero, mientras llega su momento, mide sus pasos combinando un apoyo rotundo a la reelección presidencial de Joe Biden con sus esfuerzos por brillar a nivel nacional.
El Estado Dorado es uno de los quince donde mañana, en el conocido 'Supermartes', las convenciones demócratas y republicanas se repartirán un tercio de los delegados necesarios para confirmar a Biden y Donald Trump como sus candidatos a los comicios de noviembre.
En California, donde se disputan 495 delegados demócratas, algunos expertos consideran que el presidente de EE.UU. deberá contar con la figura clave de Newsom si quiere volver a superar a Trump con tanta holgura como en 2020, cuando le sacó 5 millones de votos.
"Lo que ha hecho (Biden) estos años ha sido una clase magistral (…) Lo he visto de cerca y de lejos, su éxito se debe justamente a su edad", afirmó recientemente el carismático gobernador, que acapara titulares en la prensa semana tras semana.
Newsom ha transitado con éxito por el mundo de la empresa -con cadenas hoteleras y bodegas por toda California- y de la política, donde comenzó a hacerse un nombre en 1996.
Entonces, entró en la Comisión de Tráfico del Ayuntamiento de San Francisco y escaló puestos hasta convertirse en el alcalde más joven de dicha ciudad en 2003, a los 36 años.
Dos legislaturas después dio el salto como vicegobernador de California de la mano del demócrata Jerry Brown, a quien sustituyó como gobernador del estado en 2019 y fue reelegido en su actual cargo en 2022.
"Con una base demócrata diversa, ha demostrado que puede formar coaliciones amplias. Cumple todos los requisitos para ser el candidato de su partido (...) Es una apuesta inteligente que va a estar en la conversación en el futuro", explicó a EFE Thomas Whalen, experto en política y profesor de la Universidad de Boston.
Tras anularse en 2022 la sentencia 'Roe contra Wade', que protegía constitucionalmente el derecho al aborto desde 1931, el gobernador se afanó en convertir a California en "estado santuario" para que mujeres de todo el país tengan opción de interrumpir sus embarazos de forma legal allí y, paralelamente, que la comunidad LGTBI también pueda someterse a operaciones de transición de género.
Además, California es el estado con mayor población migrante indocumentada, 1,9 millones de personas desde 2021, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, para los que ha legislado a favor de una estancia temporal protegida que les permita trabajar en ámbitos como la agricultura.
Todo esto le ha generado sonados enfrentamientos con los gobernadores republicanos de Texas y de Florida, Greg Abbott y Ron DeSantis, respectivamente, que consideran que las políticas de su homólogo californiano atentan contra los valores tradicionales y ponen en peligro la economía y la seguridad de EE.UU.
Estos desencuentros, así como su viaje en octubre a Israel en el marco de la guerra de Gaza y justo antes de firmar un acuerdo de cooperación medioambiental entre California y China, han reforzado su proyección mediática pero, según algunos especialistas, han sido entendidos como "un desafío" al liderazgo de Biden en el partido.
"Ser presidente es una tarea increíblemente dura. Kamala Harris y él son parte del establishment del Partido Demócrata en San Francisco (...) Así que tiene una idea clara de lo que le supondría postularse. No sé cómo va a cuadrarlo con sus aspiraciones políticas", afirmó a EFE Darry Dragow, analista político senior de California.
Newsom, al igual que Harris, suena a futuro como opción para una hipotética nominación demócrata en 2028, pero hasta entonces tendrá que seguir enfocado en su gestión al frente de California y ser uno de los portavoces más activos de Biden en los medios.
Por primera vez desde 2019 más votantes desaprueban sus políticas (49 %) que las aprueban (44 %), según una encuesta de la Universidad de Berkeley de noviembre, lastrado por la inflación y por tener el número de personas sin hogar más alta del país.
De hecho, un grupo de activistas conservadores llamado Rescue California acaba de promover un nuevo intento, en 2021 ya lo propusieron sin éxito, para que Newsom tenga que enfrentarse a la posible revocación de su cargo alegando, entre otras causas, que solo se está centrado en sus ambiciones fuera de California.