Buenos Aires, 29 feb (EFE).- El presidente de Argentina, Javier Milei, tiene este viernes una de sus primeras pruebas de fuego en los casi tres meses que lleva al frente del Ejecutivo del país, ya que deberá presentarse ante la Asamblea Legislativa para ofrecer el discurso que abrirá las sesiones ordinarias en el Congreso.
Esta cita es esperada con mucha expectación, después de que el 10 de diciembre, día de su investidura, eligió no hacer su discurso inaugural dentro del recinto, sino de espaldas a él, en la calle -rodeado de representantes internacionales, como el rey Felipe VI de España o los presidentes de Chile, Gabriel Boric, y de Ucrania, Volodímir Zelenski, y de frente a sus seguidores, que se agolpaban en la Plaza del Congreso.
También en la memoria reciente se encuentra el fracaso parlamentario de su Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, más conocida como 'ley ómnibus', el proyecto estrella de su Ejecutivo, con el que buscaba desregular la economía y minimizar cuanto fuera posible la presencia del Estado.
Igualmente, el pulso mantenido desde entonces -más candente aún en la última semana- entre el economista libertario y los gobernadores de las provincias por su ajuste fiscal y los recortes de fondos que el Estado debe transferir a los territorios añaden picante a la comparecencia de Milei.
El portavoz presidencial, Manuel Adorni, dijo este jueves en su habitual rueda de prensa en la Casa Rosada (sede del Gobierno) que el discurso de Milei "aún no está escrito" y que se "está trabajando" en él, aunque sí aseguró que no incluiría ningún tono violento.
En la misma línea, el ministro del Interior, Guillermo Francos, comentó que no había que esperar "un discurso agresivo" por parte del mandatario y sí adelantó que, a partir del discurso de este viernes, "empezará un período nuevo" en el Congreso nacional.
Por lo pronto, hay dos novedades en la alocución que hará Milei ante la sede del Poder Legislativo.
Por un lado, el horario, ya que trasladó el discurso desde el mediodía de Argentina (15:00 GMT), cuando se ofrecía tradicionalmente, a las 21:00 hora local (00:00 GMT del sábado), en una cita más parecida al Estado de la Nación en Estados Unidos.
Por otro lado, se instaló en el interior de la Cámara un atril, desde donde el mandatario ofrecerá su discurso.
Uno de los problemas en el mandato de Milei, tras ganar la segunda vuelta electoral el pasado 19 de noviembre, es la necesidad de buscar acuerdos para asegurar la gobernabilidad, ya que sus números son muy bajos para sacar adelante cualquier iniciativa legislativa, como ya ocurrió durante el debate por la 'ley ómnibus'.
La Libertad Avanza, partido de ultraderecha que lidera el mandatario, tiene una clara minoría parlamentaria, con sólo 38 diputados y 7 senadores. Además, ninguno de los gobernadores del país -23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires- pertenece a su formación.
Un gran dispositivo de seguridad velará por el entorno del Congreso, donde se espera que acudan organizaciones sociales y políticas contrarias al ajuste económico impuesto por Milei.