Un Mundial en España, objetivo prioritario en la estrategia del deporte acuático español

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Madrid, 23 feb (EFE).- La apuesta por organizar el Mundial en el año 2031 o 2033 en España se constituye en objetivo prioritario que da continuidad a la estrategia de gestión, fichaje de nuevos entrenadores para explotar la captación del talento, y el desafío de fomentar disciplinas como Saltos o Aguas Abiertas en la Real Federación Española de Natación -RFEN Aquatics-. Todo ello forma parte del plan de Fernando Carpena, presidente de la Federación, que, en una amplia entrevista con EFE, disecciona las claves del éxito del último Mundial en Doha, donde España sumó 10 medallas -un oro, cinco platas y cuatro bronces-.

Números serios. España subió al podio por primera vez en la historia de los Mundiales en las cinco especialidades olímpicas -natación, natación artística, saltos, aguas abiertas y waterpolo-. Tercer mejor resultado de la historia tras las 12 medallas de Barcelona 2013 y las 11 de Roma 2009. Atrás quedan las 7 de Fukuoka en el 2023.

Fernando Carpena, explica en siete claves, el cambio de resultados y analiza la actuación de la delegación española:

 "El Waterpolo ha vivido dos meses muy intensos desde que hemos empezado el año. Con el Europeo, que certificó el primer título europeo masculino del waterpolo español. Y también la plata del Europeo femenino en casa de las holandesas, donde perdimos con un gol de rebote a falta de seis segundos. Desde 2012, las mujeres no se bajan de los cruces y las veces que hemos pasado de cruces -12- hemos ganado medalla en 11; con títulos europeos, un mundial y dos platas olímpicas. La gran noticia de todo esto es que desde 2018 coincidimos hombres y mujeres. En los años 90 y finales del siglo pasado teníamos un equipo masculino dominante, pero los chicos en 2018 se han subido a la ola y en todos los eventos referentes los últimos años han competido bien. Ahora hemos conseguido dos bronces y parecía que era poco, pero seguimos estando ahí y estamos muy satisfechos con ello. Estamos siempre dentro de los favoritos. Una línea consolidada en el femenino y la recuperación en 2018 de la buena línea del masculino, con la incorporación de David Martin, como técnico, que, junto a Miki Oca, del femenino, son los entrenadores más laureados del waterpolo mundial".

“En la artística, la evolución era muy difícil. Muy laboriosa. Nosotros pasamos una época maravillosa, luego tuvimos un pequeño bache, sin llegar a caernos. Y desde Fukuoka hemos dado un paso adelante. Coincidiendo con un cambio en el sistema de puntuación. Antes era previsible y ahora es casi imprevisible. Si cometes errores, son muy penalizados. Lo que nos ha demostrado Fukuoka y Doha es que nuestro equipo va a estar siempre optando a lo máximo. Poniendo los pies en el suelo. Pero estamos en el grupo de cuatro o cinco federaciones nacionales que podemos optar a todo. La dinámica demuestra que estaremos luchando al primerísimo nivel”.

 “Es un hombre que ya en 2017 quedó campeón del mundo junior en diversas pruebas. Siempre ha tenido un potencial enorme. Ahora está tremendamente centrado en la universidad, en California, y entrenando con los mejores. Y desde la Federación estamos ayudándole para que lo que ha conseguido pueda prolongarlo, y de cara a París, también. Hugo ha dado el paso adelante para liderar a un equipo al que queremos que ayude a crecer, que lo arrastre. Tenemos tres relevos de hombres y uno de mujeres clasificados para los Juegos Olímpicos. Con Hugo como punta de lanza, pero hay otros ocho o diez compañeros capaces de acompañarle. Y compañeras, en individual y por equipos, que van a conformar una delegación española muy potente. Con Hugo liderando”.

“Fue la primera gran noticia en el Mundial de Doha. A María Valdés la veía campeona, porque se lo merecía después de superar lesiones y un tema familiar importantísimo recientemente. Ha liderado y luchado hasta la ‘foto finish’ por el título. Junto con la joven Ángela Martinez, han conseguido la clasificación para los Juegos Olímpicos.

“En la estrategia que diseñada en la Federación, aguas abiertas y saltos han sido una apuesta clara dentro de esta. Los esfuerzos que hemos hecho y la superación de dudas que se producen cuando tú abordas una iniciativa de estas características, lo ves recompensado con dos mujeres, una de ellas subcampeona mundial, están clasificadas ambas para los Juegos Olímpicos. Es una gran alegría.

 “Domenico Rinaldi es una pieza clave. Con las pocas instalaciones que tenemos ha conseguido optimizar el rendimiento uniendo los esfuerzos de todos, manteniendo el liderazgo, con la incorporación de Arturo Miranda, un grandísimo entrenador. Y con estos saltadores ya conseguimos una plaza en los Juegos Olímpicos para Ana Carvajal, que es muy joven aún y hay que esperar a que evolucione. La incorporación de los saltos sincronizados con Nico y Adrián, con la primera medalla en un Mundial de dos saltadores españoles, en la prueba de tres metros, es un ejemplo más. María, en la prueba de tres metros individual, ha conseguido una plaza para España. Son números interesantes”.

“Carlos Gimeno ha tenido, en los últimos tiempos, dentro de World Aquatics, resultados que le han colocado en el grupo de arriba. Existe mucha igualdad en una especialidad muy difícil. Su séptimo puesto, y hasta el cuarto saltó rodando la medalla, tiene mucho mérito dentro de una disciplina que consiste en la percepción de los jueces de cómo entras en el agua a 90 kilómetros por hora”.

“España ha mostrado interés en albergar 2031 o 2033 un campeonato del Mundo. Hemos hecho manifestación de interés y estamos moviendo lo necesario para presentar una candidatura. No es consecuencia de lo de Doha, pero ayuda. Es una tesis que manejamos desde antes del éxito de este Mundial. Pero el plan refuerza nuestra apuesta. Además de generar expectativas de organizar un evento así, estaría la adecuación de una infraestructura para los Mundiales. Buscamos la organización de un Mundial que nos deje un legado en forma de una instalación que dé cabida adecuada a nuestras exigencias de nuestras propias actividades. No voy a organizar un Mundial solo por el mero hecho de organizarlo. Queremos que deje un legado de la natación en España".

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