Andrew Scott y Paul Mescal protagonizan 'Desconocidos', el nuevo largometraje del director Andrew Haigh que llega este viernes 23 de febrero a los cines españoles. El cineasta retrata a través del personaje de Adam (Scott) un drama homosexual que profundiza en los traumas y en la salud mental. "Cuando recuerda cómo fue crecer siendo gay, fue muy, muy difícil. Los años 80 fueron una época bastante horrible y creo que es muy fácil olvidarlo a medida que pasa el tiempo", apunta el británico. "Era muy importante contar una historia sobre cómo hay una generación de personas que todavía lidian con el trauma y los efectos de haber crecido en ese momento. Porque creo que es fácil de olvidar y, por supuesto, muchos de nosotros todavía tenemos las cicatrices de esa época mientras hacemos como que ya ha pasado, pero sintiendo todavía algunas emociones complicadas", explica el cineasta en una entrevista concedida a Europa Press en la que insiste en que lo interesante para él era representar las secuelas que aquellos años dejaron en las personas 'queer'. A su vez, el director aborda en 'Desconocidos' la problemática de la salud mental, cada vez más presente a día de hoy. "La vida es muy complicada y difícil. Tal vez tengamos objetivos equivocados. Y cuando tienes objetivos equivocados, siempre vas a sufrir, siempre vas a lidiar con la decepción y la tristeza. Creo que valoramos demasiado la perfección, el éxito e incluso la felicidad", reflexiona Haigh. "Para mí, y en realidad es parte de lo que va la película, se trata de darte cuenta de que la vida de todos es difícil y complicada, que todos sufrimos. Y, de alguna manera, comprender eso puede hacernos sentir un poco más felices", continúa esperanzado. Además, se aventura a dar algunas causas adicionales a los problemas de salud mental. https://youtu.be/uqWoYBitIxc?feature=shared "Estamos en una situación difícil para mucha gente e Internet, las redes sociales y todas esas cosas obvias tampoco nos ayudan", afirma el cineasta. "No sé cómo se puede solucionar. Lo que creo es que se trata de reducir nuestras ambiciones de lo que el mundo debería ser para nosotros. Y también de pasar más tiempo juntos y menos tiempo a solas con nuestros teléfonos", sentencia. A FAVOR DE LO "WOKE" En los últimos años, especialmente en la comunidad anglosajona, una parte de la sociedad ha empleado la palabra "woke" como término despectivo hacia obras y discursos que tratan temas LGTBQ+, feministas o de inclusión racial. Sin embargo, Haigh asegura que no le molestan en absoluto dichas connotaciones. "Con cada nueva generación, surge algo que se convierte en aquello por lo que todos deben luchar. Me va importando menos pero al mismo tiempo estoy muy feliz de que la gente tenga algo que defender", comienza. "Es muy importante pensar en las cosas, en cómo puedes representar a las personas en el mundo y cómo me represento a mí mismo. Todo el mundo debe ser un poco más cuidadoso y considerado, y eso es bueno. No me importa el término 'woke' porque esencialmente significa ser considerado y compasivo con las personas", manifiesta el director de 'Desconocidos'. "No me importa si la gente lo usa, la entiendo como una palabra importante para muchas personas. Para mí, solo tienes que intentar ser considerado y compasivo. Y si puedes hacer eso, eso es lo más importante", concluye al respecto, alejándose de aquellos que emplean la palabra como un insulto. PAUL MESCAL Y LA FAMA Junto a Andrew Scott, 'Desconocidos' está protagonizada por Paul Mescal, que en unos meses será el rostro principal de 'Gladiator 2'. El actor recientemente declaró en una entrevista concedida a The Times UK que está preocupado por los efectos que el filme pueda tener en su vida. "¿Me parará más gente por la calle? Me deprimiría profundamente si fuera así, espero que no sea verdad. Tendré una respuesta el año que viene, pero si la película influye en mi vida de esa manera, estaré en una mala situación", se lamentaba. Haigh ha querido responder a esas palabras y aconsejar a su intérprete. "Se volverá muy, muy famoso. Ya es famoso y se hará aún más famoso. Así que tendrá que intentar encontrar la manera de lidiar con ello. Porque va a estar en 'Gladiator 2', que será enorme", reconoce el cineasta. "Es muy difícil para los actores volverse famosos porque pierden una parte de sí mismos. Me alegra mucho que, como director, puedas esconderte y que nadie te persiga por la calle con una cámara. Y gracias a Dios, porque no se me ocurre nada más complicado que ser famoso, debe ser una cosa muy, muy difícil", celebra también aliviado por su situación personal. "Pero lo que será genial para Paul es que tiene muy buen gusto y quiere hacer películas que signifiquen algo para él. Él se considera un actor. No quiere ser una estrella, es actor y eso es lo que le mantendrá equilibrado", pronostica en referencia a Mescal.