Puerto Príncipe, 30 ene (EFE).- La imputación por asesinato a Martine Moise, viuda del presidente haitiano Jovenel Moise, abre un nuevo capítulo en la investigación de este magnicidio, un caso por el que cinco personas ya se han declarado culpables ante la justicia de Estados Unidos, donde se planificó y financió el complot.
Moise fue torturado y asesinado la madrugada del 7 de julio de 2021 en su residencia privada del sector capitalino de Pétion-ville por un grupo de mercenarios, en su mayoría colombianos.
En el ataque su esposa, la primera dama Martine Moise, resultó herida, por lo que ese mismo día fue trasladada a Miami (Estados Unidos).
Informaciones publicadas este martes en la prensa local dan cuenta de que el juez Walter Wesser Voltaire, quien investiga el caso, emitió una orden de detención contra Martine Moise en octubre de 2023 con relación al asesinato del jefe de Estado.
La mujer, quien siempre ha abogado por la creación de un tribunal internacional que investigue la muerte de su marido, está acusada de robo a mano armada, intento de asesinato y conspiración para atentar contra Jovenel Moise, de acuerdo con las publicaciones.
La noticia sobre la acusación de la ex primera dama se ha conocido coincidiendo con el fin de la gestión de Wesser Voltaire, cuya sentencia podría hacerse pública entre finales de febrero y marzo, de acuerdo con las informaciones divulgadas.
De momento, Martine Moise no se ha referido públicamente al tema.
El exsenador haitiano Joseph Joel John, el haitiano-chileno Rodolphe Jaar y el exmilitar colombiano Alejandro Rivera García han sido sentenciados a cadena perpetua en un tribunal de Miami por su participación en el magnicidio.
Otras dos personas, el exmilitar colombiano Mario Antonio Palacios y el haitiano-colombiano y exinformante del Departamento Estadounidense Antidrogas (DEA) Joseph Vincent, se declararon culpables del asesinato y esperan sentencia en Miami.
De acuerdo con documentos de la corte de Miami, entre febrero y julio de 2021 el sur de Florida "sirvió como lugar central para planificar y financiar el complot para derrocar al presidente Moïse y reemplazarlo con alguien que sirviera a los objetivos políticos e intereses financieros de los conspiradores".