Lisboa, 25 ene (EFE).- El presidente del Gobierno regional de Madeira, Miguel Albuquerque, dijo este jueves que no dimitirá a pesar de haber sido declarado sospechoso formal en una investigación por corrupción y reiteró que tiene la conciencia "tranquila".
"Soy 'arguido' (sospechoso formal, una figura previa a la acusación), pero no dimito", señaló en declaraciones a periodistas en Funchal, la capital de Madeira, un día después de un operativo policial por supuestos contratos irregulares de su Gobierno.
Albuquerque, del Partido Social Demócrata (PSD, centroderecha), aseguró que "ser sospechoso no es nada" y no acepta "ser linchado en la plaza pública" sin poder defenderse.
"No me han culpado ni condenado, no robé nada a nadie", insistió el presidente regional, que dijo que colabora con la justicia para que se esclarezca el caso y pedirá que se le levante la inmunidad que tiene por ser consejero de Estado.
Este paso es necesario para que pueda ser interrogado por la justicia.
Cuestionado por las declaraciones que hizo en noviembre, cuando señaló que la dimisión del primer ministro, António Costa, era "inevitable" en el marco de la investigación en su contra, Albuquerque apuntó que no va a hablar del socialista y reiteró que no dimitirá.
La Policía portuguesa realizó el jueves un operativo con cerca de 130 registros, entre ellos en la casa de Albuquerque, por supuestas irregularidades en contratos realizados por el Gobierno de Madeira y varias instituciones públicas de la región con empresas.
El alcalde de Funchal, Pedro Calado, y dos empresarios fueron detenidos.
En el caso se investigan delitos de corrupción activa y pasiva, prevaricación, recibo u oferta indebida de ventaja, abuso de poderes y tráfico de influencias, por hechos ocurridos a partir de 2015.
La Fiscalía precisó en un comunicado que sospechan que "titulares de cargos políticos del gobierno regional de Madeira y del Ayuntamiento de Funchal hayan favorecido indebidamente a algunas sociedades/grupos en detrimento de otras o que, en algunos casos, hayan ejercido influencia con ese objetivo".
La investigación está ligada "esencialmente" al elevado número de contratos de obra realizados por el Gobierno regional, valorados en "varias centenas de millones de euros". EFE
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