Mérida (México), 25 ene (EFE).- Una muestra con 59 obras del pintor catalán Joan Miró de colecciones privadas se exhibe en la ciudad de Mérida (sureste de México), que alberga la exposición como un regalo por su 482 aniversario.
La muestra del también escultor, grabador y ceramista, denominada 'Miró. Mística y vanguardia', pretende que el público comprenda a uno de los grandes creadores plásticos del siglo XX, quien nació en Barcelona en 1893 y murió en Palma de Mallorca en 1983.
“En los cuadros vemos la identidad iconográfica de Joan Miró, con personajes sintéticos, apenas con un brazo, tronco, pierna, cabeza y ojos, así como sus paisajes celestes y elementos marinos”, explicó a EFE este jueves el curador de la muestra, Santiago Pérez Garci.
La exposición permanecerá en el Centro Cultural Olimpo de Mérida, capital del estado de Yucatán, hasta el 4 de mayo próximo.
“Miró cautiva en todo México y el mundo porque es alguien que no solo trascendió la escena española y europea, su impacto fue decisivo para el desarrollo del impresionismo en Norteamérica”, precisó Pérez Garci sobre el autor.
El curador, quien espera la visita de 20.000 personas durante la exposición de enero a mayo, explicó que hay un objetivo: que el visitante vea a Miró desde una posición en la historia del arte, pero que tenga la libertad estética, artística y expresiva.
“El visitante debe entender la obra de Miró como un proceso intelectual de síntesis creativo, vinculado con un orden conceptual de las vanguardias, pero también con una práctica mística y de vocación religiosa que se recombinan para concebir el arte desde una mirada radical en su juventud”, detalló.
Los cuadros del artista catalán muestran, según describió, que “se volcó más hacia una abstracción expresionista, con elementos formales que se entretejen con la identidad cromática que se vuelve característica de la iconografía del artista”.
En la inauguración, el curador y museógrafo habló sobre los diferentes momentos de la vida de Miró, su tránsito continuo entre su natal Barcelona, su estancia en París, la costa de Normandía y sus viajes a Nueva York.
“Eso le permitió vincularse con toda la revolución estética que marcaría la pintura, la escultura, poesía y obra editorial, así como las tendencias vanguardistas, su marcada formación religiosa católica y visión mística”, comentó.
La obra, reunida de diversas colecciones privadas de España, permite ver la evolución del arte gráfico creado en el siglo pasado.
En tres salas del Centro Cultural Olimpo, el visitante encontrará litografías, calcografías realizadas en técnicas de aguafuertes, aguatintas, a veces combinadas, así como algunas tintas secas y xilografía.