Bangkok, 16 ene (EFE).- El presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos Jr., ha asegurado que espera una "estrecha colaboración" con Taiwán tras felicitar al presidente electo, Lai Ching-te, por su victoria en las elecciones del sábado, en plena tensión entre Manila y Pekín por disputas territoriales.
"En nombre del pueblo filipino, felicito al presidente electo Lai Ching-te en su elección como el próximo presidente de Taiwán. Esperamos una colaboración estrecha, fortalecer los intereses mutuos, impulsar la paz y asegurar la prosperidad de nuestros pueblos en los próximos años", subraya Marcos Jr. en un comentario publicado en su cuenta de X (antiguo Twitter) la pasada noche.
El comentario de Marcos Jr. se produce después de la victoria electoral en Taiwán el sábado del gobernante Partido Democrático Progresista, representado por William Lai (Lai Ching-te), crítico con Pekín.
Si bien el presidente filipino ha felicitado a Lai, el ministerio de Exteriores del archipiélago emitió un comunicado la víspera recordando su reconocimiento de la política de 'una sola China', que defiende a Pekín como el único gobierno legítimo, y el compromiso para resolver las disputas con Manila sin "el uso o amenaza de la fuerza".
Las relaciones entre China y Filipinas atraviesan un periodo de tensiones, marcadas por disputas territoriales en el mar de China Meridional que se han agudizado desde la llegada al poder de Marcos Jr. en 2022, en contraste con el acercamiento a Pekín de su precedesor, Rodrigo Duterte.
Taiwán, isla autogobernada que Pekín considera una provincia rebelde y que no descarta invadir, es un asunto especialmente delicado en las relaciones entre China y Filipinas, que amplió hace un año el Pacto Mejorado de Cooperación en Defensa (EDCA, por sus siglas en inglés) con EE.UU., dando acceso a las tropas estadounidenses a cuatro nuevas bases militares filipinas.
Dos de ellas se encuentran a menos de 400 kilómetros de Taiwán, lo que facilitaría a EE.UU. defender la isla si así lo decidiera en caso de ataque de Pekín, y otra base frente al disputado mar de China Meridional.
Taiwán es uno de los principales puntos de fricción entre Pekín y Washington, ya que EE.UU. es el principal proveedor de armas de la isla y se da por hecho que la defendería en caso de conflicto con China, una posición conocida como “ambigüedad estratégica”.