Las autoridades de Rusia han informado de que una niña de once años ha resultado herida levemente tras un ataque ucraniano con drones contra la ciudad rusa de Voronezh, cerca de la frontera con Ucrania, después de anunciar la intercepción de numerosos vehículos aéreos no tripulados. "Tal y como han clarificado los compañeros del Ministerio de Emergencias, una niña ha necesitado atención médica por los fragmentos de un dron derribado cerca de un apartamento en la calle Teplichnaya", ha informado el gobernador de Voronezh, Alexander Gusev, en su canal de Telegram. Asimismo, ha asegurado que la niña, nacida en 2013, ha sufrido cortes en los brazos, en las piernas y en el cuello, por lo que ha sido atendida en el lugar y no ha necesitado ser trasladada al hospital. Previamente, Gusev había comunicado que se habían repelido un número indeterminado de drones, lo que había provocado un incendio en el balcón de un apartamento y la ruptura de varias ventanas de viviendas.