El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha advertido este viernes que los niños y niñas de la Franja de Gaza cada día corren "un mayor riesgo de muerte" por los continuos ataques y por la falta de agua y comida en la región, consecuencia de "la pesadilla que comenzó el 7 de octubre" y que continúa "después de casi 100 días de violencia, asesinatos, bombardeos y cautiverio". "Todo este sufrimiento (de los niños y niñas gazatíes) ha sido demasiado", ha sentenciado la representante especial de UNICEF sobre la situación de la infancia en los territorios palestinos, Lucia Elmi. Elmi ha lamentado que "la situación sigue deteriorándose rápidamente" en un contexto en el que los niños se enfrentan a una "triple amenaza" de "conflicto, enfermedades y desnutrición", y ha asegurado que "se les está acabando el tiempo" en tanto que "la mayor parte de la ayuda humanitaria que necesitan desesperadamente sigue estancada entre corredores de acceso insuficientes y prolongadas inspecciones". A este respecto, la representante de UNICEF ha defendido que desde el organismo están haciendo todo lo que pueden para abordar este "desafío increíble", aunque ha reconocido que "las crecientes necesidades y una respuesta limitada son el caldo de cultivo para un desastre de proporciones épicas". SEGURIDAD, LOGÍSTICA Y COMERCIO PARA EVITAR MÁS MUERTES Lucia Elmi ha denunciado que "miles de niños y niñas ya han muerto" y ha alertado de que "miles más lo estarán rápidamente" si no se atienden "de inmediato" tres aspectos "urgentes" en la región: la seguridad, la logística y lo comercial. En lo que a la seguridad respecta, la portavoz de UNICEF ha argumentado que "ningún lugar es seguro en la Franja de Gaza" y que "intensos bombardeos (...) en zonas urbanas densamente pobladas amenazan las vidas de civiles y trabajadores de ayuda humanitaria", impidiendo además la entrega de ayuda. En relación a la logística, ha destacado que no están recibiendo suficiente ayuda y que "el proceso de inspección sigue siendo lento e impredecible", en parte porque "algunos de los materiales que necesitamos urgentemente siguen restringidos sin una justificación clara". "Además, una vez que llega la ayuda, existen importantes desafíos para distribuirla en toda la Franja de Gaza, particularmente en el norte y recientemente también en la zona central", ha apostillado Elmi, quien ha destacado que los "frecuentes cortes de comunicaciones hacen extremadamente difícil coordinar la distribución de la ayuda e informar a la gente sobre cómo y cuándo acceder a ella". Por último, desde UNICEF han señalado que "la ayuda humanitaria por sí sola no es suficiente". "El volumen de bienes comerciales a la venta en la Franja de Gaza debe aumentar, y hacerlo rápidamente. Lo que se necesita son al menos 300 camiones con mercancías comerciales privadas cada día. Esto ayudará a las personas a comprar bienes esenciales, aliviar la tensión comunitaria y estimular los programas de ayuda en efectivo ofrecidos por UNICEF y otras organizaciones", ha explicado la representante del Fondo en la región. "MUY POCOS CAMBIOS" No obstante, desde la agencia de la ONU han evidenciado que están "viendo muy pocos cambios" y que "las consecuencias se miden, a diario, en la pérdida de vidas de niños y niñas". En este sentido han reiterado su llamamiento a un "alto el fuego inmediato y duradero", alegando que esta "es la única manera de poner fin a las muertes y lesiones de niños y sus familias, y de permitir la entrega urgente de la ayuda que se necesita desesperadamente". Hasta que esto suceda, han instado entre otras cuestiones a la apertura de todos los cruces de acceso a la Franja, la aceleración de los procesos de aprobación e inspección de las ayudas, entrada inmediata de una mayor cantidad de combustible o protección de la infraestructura civil como escuelas y hospitales. Demandas a las que se ha unido la exigencia de liberar "incondicionalmente y en condiciones de seguridad" a los dos niños israelíes secuestrados.