Washington, 09 ene (EFE).- El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, padece un cáncer de próstata, motivo por el que lleva hospitalizado desde el 1 de enero, según informaron este martes los médicos que lo tratan en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed.
La hospitalización del jefe del Pentágono ha estado rodeada de secretismo y ni siquiera el presidente estadounidense, Joe Biden, fue informado inmediatamente de ello.
En el comunicado, el hospital detalla que a Austin se le detectó cáncer de próstata durante unos exámenes rutinarios a principios de diciembre.
El 22 de diciembre se sometió en el mismo Walter Reed a un procedimiento quirúrgico "mínimamente invasivo" llamado prostatectomía para tratar y curar el cáncer de próstata, para el cual recibió anestesia general.
Austin "se recuperó sin incidencias de su cirugía y regresó a su casa a la mañana siguiente".
El 1 de enero fue admitido de nuevo en el hospital al padecer complicaciones de su procedimiento, incluidas náuseas y dolor intenso abdominal, de cadera y de piernas.
Los exámenes revelaron que sufría una infección del tracto urinario, por lo que al día siguiente "se tomó la decisión de trasladarlo a la Unidad de Cuidados Intensivos".
"Ha progresado constantemente durante su estancia. Su infección ha desaparecido. Continúa mejorando y anticipamos una recuperación total, aunque puede ser un proceso lento", apuntaron los médicos en el comunicado.
En la nota se remarcó que desde su ingreso el 1 de enero Austin "nunca ha perdido el conocimiento y no ha sido sometido a anestesia general".
En una rueda de prensa posterior, el secretario de prensa del Pentágono, Pat Ryder, informó de que sigue hospitalizado y que no tiene información sobre cuando recibirá su alta médica.
El portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, afirmó este lunes que la Presidencia estadounidense no fue informada de la hospitalización del jefe del Pentágono hasta el 4 de enero por la tarde, tres días después de que ingresase en el centro médico.
Este lunes se precisó que desde que Austin retomó sus funciones el día 5 por la noche ha estado recibiendo información operativa y brindando la orientación necesaria. Sigue monitoreando las operaciones del Departamento de Defensa en todo el mundo y está en contacto con su equipo.
Este evento ha provocado que la Casa Blanca anunciase que se revisarán los protocolos de información sobre el estado de salud de altos funcionarios.
Una prostatectomía "es una cirugía para extirpar toda la glándula prostática y los ganglios linfáticos circundantes para tratar a hombres que padecen cáncer de próstata localizado", según explica la Clínica Mayo.
Washington, 9 ene (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, no fue informado hasta este martes por la mañana de que el secretario de Defensa, Lloyd J. Austin III, había estado hospitalizado debido a complicaciones después de haber sido operado de un cáncer de próstata.
John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, explicó en una rueda de prensa que el jefe de gabinete de Biden, Jeffrey D. Zients, fue informado esta mañana de la enfermedad de Austin y enseguida le trasladó esos detalles al mandatario.
Austin, quien fue diagnosticado a principios de diciembre de cáncer de próstata, no comunicó esa información a la Casa Blanca. Además, tampoco indicó inmediatamente a Biden que había sido hospitalizado el 1 de enero, sino que esperó hasta el 4 de enero de la semana pasada.
En consecuencia, Biden no sabía hasta este martes la razón por la que Austin había sido hospitalizado, indicó Kirby.
Los médicos que están tratando a Austin en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, a las afueras de Washington, revelaron este martes en un comunicado las razones por la que había estado ingresado.
La hospitalización ha estado rodeada de polémica por la falta de transparencia de Austin, que asumió el sábado 6 de enero en un comunicado la responsabilidad de lo ocurrido.
El público no fue informado de su estancia hospitalaria hasta el viernes pasadas las 17:00 hora local (22:00 GMT), cuando la mayoría de las instituciones de Washington estaban cerrando antes del fin de semana.
Miembros del Congreso de EE.UU. aseguran que recibieron información sobre la hospitalización solo minutos antes de que fuera publicado ese comunicado del viernes.
La controversia ha provocado una revisión de los protocolos dentro del Pentágono y la Casa Blanca para aclarar cómo los miembros del Ejecutivo deben informar al presidente cuando no puedan ejercer sus funciones y cómo deben delegar sus labores.
Austin, de 70 años, sigue hospitalizado y el Departamento de Defensa no ha explicado cuándo podría ser dado de alta.