Washington, 2 ene (EFE).- El fabricante chino BYD superó por primera vez al estadounidense Tesla en la venta de vehículos eléctricos durante el último trimestre de 2023, una señal de la creciente fortaleza de China en el mercado global de este tipo de transporte.
Este martes, Tesla informó que en el cuarto trimestre de 2023 había vendido 484.507 vehículos eléctricos, menos que los 525.409 comercializados por BYD en el mismo periodo.
Aun así, Tesla se mantuvo por delante de BYD durante todo el año y entregó a sus clientes de todo el mundo aproximadamente 1,81 millones de vehículos eléctricos, cumpliendo con sus expectativas y superando ligeramente las estimaciones de Wall Street.
De esa manera, la entrega de vehículos eléctricos de Tesla creció un 38 % con respecto al año anterior.
Según la compañía, la inmensa mayoría de los vehículos que produjo el año pasado, el 96 % o 1.775.159 unidades, fueron Model 3 y Model Y. El resto, unos 70.826, fueron en su mayoría los más caros Model X y Model S.
En diciembre, Tesla empezó a entregar un número ínfimo de unidades de su camioneta 'pick up', Cybertruck.
En comparación con esos datos, BYD vendió casi 1,6 millones de vehículos eléctricos el año pasado, lo que supone un aumento del 70 % en comparación con 2022.
Las cifras de Tesla, mejores de lo esperado, muestran que la marca aún goza de popularidad a pesar de que la imagen de su consejero delegado, Elon Musk, está en entredicho por sus comentarios en redes sociales y la postura belicosa que ha adoptado hacia sindicatos, reguladores y clientes.
Recientemente, Musk aseguró que en 2024 Tesla crecerá "más rápidamente" que ninguna otra compañía de automóviles del mundo.
Mientras tanto, el rápido crecimiento de BYD, respaldada por el conocido inversor estadounidense Warren Buffett, muestra la fortaleza del sector de los vehículos eléctricos en China.
BYD, líder en el sector chino de los eléctricos y el tercer mayor fabricante de baterías para coches eléctricos del mundo, ha puesto la vista recientemente en el mercado europeo con una planta de producción en Hungría para evitar cualquier tipo de restricciones comerciales.