Bogotá, 9 dic (EFE).- No es cierto que durante la covid-19 Colombia ampliara sus Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) más que ningún otro país solo por beneficios económicos; varios Estados adoptaron esa medida e incluso España lo hizo en mayor proporción que la nación latinoamericana, pese a lo que dijo el ministro de Salud, Guillermo Jaramillo.
"Triplicaron las camas de la Unidad de Cuidado Intensivo porque fue un negocio. Ningún país del mundo tuvo que ampliar las Unidades de Cuidados Intensivos como las ampliamos aquí", sostuvo el funcionario este miércoles en un discurso en el Senado.
Recientemente, el ministro ya había protagonizado otra polémica, tras afirmar que los colombianos que se vacunaron habían servido "para el más grande experimento" de la historia.
Diversos expertos, entre ellos los miembros de la Academia Nacional de Medicina, reaccionaron a los comentarios del representante de la cartera de Salud, quien tuvo que retractarse más tarde en un comunicado en el que reivindicó su postura a favor de las vacunas.
HECHOS: Datos oficiales de Colombia demuestran que el país no llegó a triplicar su capacidad UCI en la pandemia, contrariamente a lo que dijo el ministro. Además, estudios prueban que muchas naciones ampliaron sus unidades ante la contingencia y al menos España tuvo un crecimiento mayor al colombiano, de acuerdo a información del Ministerio de Sanidad español.
En primer lugar, Jaramillo señaló erróneamente que en Colombia se "triplicaron" las UCI.
Una nota de prensa publicada en 2022 por el Ministerio de Salud colombiano indica que "en el momento más intenso de la contingencia" la nación consiguió habilitar 13.105 camas de cuidados intensivos.
Se trata de una cifra aproximadamente 2.5 veces mayor a la que había al comienzo de la pandemia.
Para ese momento, el país solo contaba con 5.346 camas, según cifras divulgadas en febrero de 2020.
Es decir, Colombia sí dobló sus UCI, pero no las triplicó.
Las declaraciones del ministro Jaramillo tampoco se sostienen si se toma como referencia a España, cuyas estadísticas gubernamentales demuestran que el país incrementó sus camas UCI en mayor medida que Colombia.
En marzo de 2020, durante la primera ola de contagios, España logró tener 13.801 camas de cuidados intensivos, mientras que en 2019 el país solo contabilizaba 4.447.
El número de camas en algunas comunidades autónomas "cuadruplicó e incluso quintuplicó" la dotación en funcionamiento previa a la pandemia, explica el Informe Anual del Sistema Nacional de Salud 2020-2021, publicado por el Ministerio de Sanidad español.
El mismo texto resume que "globalmente se alcanzó un número 2.8 veces mayor que la dotación en funcionamiento previa a la pandemia".
Por otra parte, un artículo publicado por la revista científica Health Policy, con la que colabora el Observatorio Europeo sobre Sistemas y Políticas Sanitarias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), demuestra que múltiples Gobiernos ampliaron su capacidad UCI de forma sobrevenida.
No obstante, el porcentaje de crecimiento varió de un país a otro, dependiendo de sus condiciones previas a la crisis sanitaria.
"El mayor aumento en el número de camas UCI se logró en Irlanda, los Países Bajos y Suecia, donde la capacidad al menos se duplicó en comparación con niveles anteriores a la covid", concluye el documento.
De hecho, según el estudio, en Países Bajos, Suecia y Lombardia (Italia), no se hubieran podido tratar a todos los pacientes que necesitaron cuidados intensivos si la adaptación de recursos se hubiera omitido.
La "reconversión" de espacios fue en realidad una recomendación de los especialistas.
La oficina panamericana de la OMS publicó en 2020 una guía técnica en las que sugería convertir los quirófanos o salas de recuperación en unidades de terapia y cuidados intensivos.
En conclusión, el ministro de Salud colombiano afirmó falsamente que ningún país amplió tanto como Colombia las UCI durante la pandemia. Al menos España logró aumentar sus recursos en mayor medida que el país latinoamericano y la iniciativa no respondía a intereses económicos, sino a una recomendación internacional.