Dubái, 1 dic (EFE).- El presidente de Mozambique, Filipe Nyusi, subrayó hoy en su intervención en Dubái en la Cumbre del Cambio Climático de las Naciones Unidas (COP28) que, pese a que su país emite apenas el 0,5 % de los gases contaminantes del planeta, está entre los más golpeados por la crisis climática.
"Mozambique, a pesar de contribuir con menos del 0,5 % de las emisiones de gases de efecto invernadero del mundo, se encuentra entre los diez países que sufren los efectos más duros del cambio climático", dijo Nyusi ante decenas de jefes de Estado y de Gobierno en el plenario de la cumbre.
Así, el presidente mozambiqueño recordó los efectos "devastadores" del ciclón tropical Freddy los pasados meses de febrero y marzo, que dejó más de seiscientos muertos en Madagascar, Malaui y Mozambique, según los datos recogidos por las Naciones Unidas.
La ONU también indicó que el ciclón golpeó al 68 % de los hogares de Mozambique, después de que sus casas o sus cultivos quedasen dañados por las inundaciones o los vientos extremos.
Para paliar los efectos de estos choques climáticos, Nyusi destacó que su país "apoya las iniciativas financieras internacionales" para las "acciones climáticas", como los mercados de carbono, que buscan compensar las emisiones de gases de efecto invernadero.
En este sentido, anunció que Mozambique "está en contacto con varios países para firmar acuerdos" de mercados de carbono y que su nación está preparando una cumbre para proteger al bosque de miombo (un tipo de sabana boscosa), aunque no indicó ninguna fecha.
El bosque de miombo cubre una buena parte de las planicies del sur de África y proporciona refugio y alimento a una gran variedad de vida salvaje, incluidas las jirafas, los rinocerontes y los elefantes.
Dubái, 1 dic (EFE).- El presidente de Guyana, Irfaan Ali, solicitó este viernes medidas para que la crisis climática no continúe afectando a "los países en desarrollo y los más pobres", durante la sesión de apertura de la cumbre del clima de Dubái (COP28).
"Si queremos conseguir una transición asequible necesitamos que se sienten a la mesa todos los que tengan una solución que proponer, y tenemos que reconocer que la acción climática no puede ser decremento de los países en desarrollo y de los más pobres", subrayó Ali durante su intervención.
Los impactos de la crisis climática varían en magnitud dependiendo de la localización geográfica y los países caribeños se han visto muy afectados.
Asimismo, el mandatario guyanés resaltó que para lograr el objetivo de emisiones netas cero para 2050 "no se debe ignorar la realidad" y es necesario "terminar con la producción de combustibles fósiles y remover la contaminantes de las cadenas de suministro".
A su juicio, "es un hecho que las renovables no serán la solución en un futuro cercano".
En este contexto, el presidente de Guyana hizo hincapié en que se requiere "preservar los bosques tropicales como los de Guyana".
El 86 % del territorio de Guyana está cubierto por bosques y el Gobierno guyanés alcanzó este año un acuerdo para vender 750 millones de dólares en créditos de carbono certificados internacionalmente a la compañía estadounidense Hess Corporation durante la próxima década.
Un consorcio de empresas liderado por la estadounidense ExxonMobil es el desarrollador de un bloque gigante llamado Stabroek en la costa de Guyana, que cuenta en su cuenca con reservas de petróleo estimadas en más de 11.000 millones de barriles.
"Guyana continuará siendo un líder mundial en materia de seguridad climática. Nos solidarizamos con todos los que trabajan para crear un futuro mejor, especialmente los países en desarrollo, y siempre antepondremos las soluciones prácticas", zanjó Ali.
El primer ministro de la India, Narendra Modi, tras mantener una reunión bilateral con Ali, publicó en su cuenta de la red social X que sus "conversaciones pusieron de relieve la importancia de una estrecha cooperación entre los países del sur global en la búsqueda de un futuro sostenible para nuestro planeta".
Del mismo modo, el mandatario guyanés se reunirá este viernes en Doha con su homólogo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, según informaron fuentes oficiales brasileñas.
La reunión bilateral ocurrirá en momentos en que Guyana mantiene una creciente tensión diplomática con Venezuela por la Guayana Esequiba, un territorio de casi 160.000 kilómetros cuadrados.
Dubái, 1 dic (EFE).- El presidente de Sri Lanka, Ranil Wickremesinghe, lamentó este viernes que las contribuciones al fondo de pérdidas y daños, que compensará a los países más vulnerables al cambio climático por los impactos del calentamiento, sean voluntarias, durante la sesión de apertura de la cumbre del clima de Dubái (COP28).
"¿A quién estamos engañando?", se preguntó Wickremesingue, al señalar que los países más vulnerables al cambio climático se ven privados de justicia a pesar de que "el enemigo está a las puertas y nos estamos demorando".
La COP28 adoptó ayer en Dubái, en su primer día de reuniones, la puesta en marcha de un fondo de pérdidas y daños para los países más vulnerables a la crisis climática por los impactos del calentamiento.
Emiratos Árabes Unidos y Alemania se comprometieron a aportar, cada uno, 100 millones de dólares, mientras que el Reino Unido dijo que aportaría 40 millones de libras; Estados Unidos, 17,5 millones de dólares y Japón otros 10 millones. La Unión Europea, haciendo un recuento de los compromisos de sus estados miembro, dijo que aportaría al menos 225 millones.
Pero el presidente esrilanqués denunció que estas aportaciones voluntarias no son suficientes, haciendo referencia al reciente reporte de la ONU conocido como inventario mundial (Global Stocktake, en inglés), que señala que los países en desarrollo necesitan un mínimo de un billón de dólares por año para alcanzar sus metas climáticas.
Esta cifra deberá elevarse a 5,9 billones de dólares anuales en 2050.
El presidente esrilanqués destacó el serio desafío que presenta la inseguridad alimentaria en su país, una situación que la ONU espera que vaya a peor como consecuencia del cambio climático.
La COP28 se prolongará hasta el próximo día 12 de diciembre y reunirá a miles de líderes globales, activistas, científicos y representantes de la industria y la sociedad en busca de soluciones en una encrucijada clave para el futuro climático y energético del planeta.