"Día histórico" para los países más vulnerables al cambio climático, valoran especialistas

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Dubái, 30 nov (EFE).- Especialistas en diplomacia climática valoran el “día histórico” que supone este arranque de la COP28, que en su primera jornada ha decidido las condiciones que permiten poner en marcha el fondo de pérdidas y daños que los países acordaron crear en noviembre de 2022.

“Es un día verdaderamente histórico y remarcable”, señaló ante un grupo de periodistas el enviado especial del clima de Barbados, Avinash Persaud, uno de los negociadores del Comité de Transición del fondo de pérdidas y daños en representación de los países en desarrollo.

Persaud aseveró que las condiciones del fondo las han fijado ellos, y que ahora el Banco Mundial, elegido para alojar de manera provisional este mecanismo, deberá atenerse a ellas y, si en cuatro años demuestra funcionar bien, seguirá acogiéndolo.

El economista destacó asimismo el papel del sector privado para contribuir a este mecanismo a través de “fuentes innovadoras” de financiación como, por ejemplo, un impuesto al carbono para las exportaciones, la industria marítima o para la aviación internacional, diseñado de manera que sea “justa” para todos.

En este punto, cualquiera puede aportar dinero al fondo de pérdidas y daños, que se espera llegue a contar con 100.000 millones de dólares anuales y al que de momento varios países (Emiratos Árabes Unidos, EE.UU., el Reino Unido, Alemania, Japón y la Unión Europea) se han comprometido a contribuir.

 

Por su parte, Joe Thwaites, especialista en diplomacia climática del Consejo para la Defensa de los Recursos Naturales, indicó que el acuerdo de este jueves ha establecido tres precedentes.

El primero, que se haya adoptado una decisión formal -que se podría esperar de las horas finales de una COP- en el primer día de la cumbre, algo inaudito, según subrayó también el presidente de la COP28, Sultán Al Yaber.

El segundo, que EAU, un país clasificado por la Convención Marco de la ONU de Cambio Climático -según un anexo que data de 1992- como “en desarrollo”, haya sido el primero en prometer aportar al fondo, con 100 millones de dólares, la misma cifra que ha prometido después Alemania.

“Es bastante raro que un país considerado formalmente en desarrollo se ponga a la altura de las circunstancias y esté dispuesto a contribuir”, arguyó asimismo la directora del programa de clima del IDDRI, Lola Vallejo.

El tercer precedente, prosiguió Thwaites, ha sido “tener los compromisos el primer día”, pues normalmente, cuando se han creado fondos para el clima en el marco de la ONU se acuerda el instrumento de gobierno y después hay que esperar “años y años hasta que hay compromisos de aportaciones, explicó.

“Hemos esperado mucho tiempo para que llegara este día, en particular los pequeños Estados insulares, que son los canarios en la mina del cambio climático”, añadió Persaud, si bien calificó como “decepcionante” el compromiso de EE.UU. -el mayor responsable histórico del calentamiento global- de contribuir al fondo con 17,5 millones.

Persaud, que ha trabajado junto a la primera ministra de Barbados, Mia Mottley -impulsora de la Agenda de Bridgetown para reformar el sistema financiero internacional-, enfatizó que los países vulnerables al clima son ahora también los más endeudados del mundo, pues “tienen que financiar la rehabilitación reconstructiva sin financiación”.

“Se trata del 40 % de la población mundial, 3.200 millones de personas:  no son solo los pequeños Estados insulares, sino también el cinturón de sequía de África, los países asiáticos de renta baja… Necesitamos un fondo basado en subvenciones y centrado en fenómenos meteorológicos extremos”.

El comisario europeo de Acción Climática, Wopke Hoekstra, afirmó en su cuenta oficial de X (antes Twitter) que la adopción de ese fondo crea “un impulso positivo al comenzar dos semanas” de la COP28 que tildó de “cruciales” para el planeta y las generaciones venideras.

Por otro lado, el exministro peruano Manuel Pulgar-Vidal, uno de los arquitectos del Acuerdo de París y presidente de la COP20 de Lima, declaró a EFE que lo que demandan es “agilidad” para este fondo.

No obstante, el ahora responsable mundial de Clima y Energía de WWF indicó que finalmente las pérdidas y daños son “pagados por los más pobres, por el que pierde su casa, el que pierde su actividad económica el que pierde sus cabezas de ganado, el que pierde sus tierras y el que cubre con sus propios recursos estas pérdidas”.

Sobre la puesta en marcha de este fondo, la experta en políticas globales de Greenpeace Internacional, Tracy Carty, dijo en un comunicado que este acuerdo es un “primer paso fundamental para garantizar que estas comunidades empiecen a recibir el apoyo que necesitan desesperadamente”.

Sin embargo, consideró que es un fondo que “se queda corto para lo que realmente necesitan y que se merecen”, y añadió que “lo que no está claro es de dónde va a salir el dinero”. EFE

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(foto)(vídeo)

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