Dublín, 24 nov (EFE).- El Gobierno de Irlanda ha reforzado la presencia policial en Dublín para evitar que se reproduzcan los violentos disturbios de anoche, que se saldaron con 34 detenidos y varios policías heridos y que han provocado el rechazo del Ejecutivo de coalición entre democristianos, centristas y verdes.
Las autoridades no descartan que grupos de "hooligans" de "extrema derecha" y "anti-inmigración" vuelvan a escudarse en el apuñalamiento de cuatro personas, tres de ellas niños, ocurrido el jueves para destrozar de nuevo el centro de la capital.
El primer ministro irlandés, Leo Varadkar, advirtió este viernes de que hay más protestas programadas a través de las redes sociales para este fin de semana con la intención de repetir unos sucesos que han "avergonzado" a todo el país.
"Quiero decirle a una nación que está inquieta y asustada que esto no nos representa", declaró el mandatario, quien elogió la respuesta de ciudadanos de "diferentes nacionalidades" para reducir al atacante, a los que calificó de "auténticos héroes de Irlanda".
"Ayer, algunos decidieron que la mejor manera de responder a ese terrible suceso era tomar las calles de Dublín para aterrorizar, intimidar, saquear y destruir", lamentó Varadkar, de origen indio y abiertamente gay.
El "taoiseach" (primer ministro) confirmó hoy que dos de los apuñalados, una niña de cinco años y una trabajadora de la escuela ante la que se produjo el ataque, se encuentran en estado grave, mientras los otros dos menores están fuera de peligro.
La Policía irlandesa (Garda) ha detenido al supuesto agresor, que también resultó herido por arma blanca tras ser reducido por viandantes, y aunque no ha informado aún sobre su identidad o el motivo del ataque, se sabe que no ha nacido en este país pero tiene pasaporte irlandés.
A raíz de este suceso, las redes sociales comenzaron a llenarse de informaciones sobre el presunto origen magrebí del sospechoso, con contenidos que las autoridades consideran que podrían considerarse como mensajes de odio.
En este sentido, la red social TikTok, cuya base de operaciones europeas está en Dublín, indicó hoy que está "vigilando de cerca" la plataforma "desde ayer por la tarde" y que está "eliminando de forma proactiva cualquier contenido que viole" sus directrices.
Un portavoz reiteró que la compañía "no permite amenazas violentas, incitación a la violencia o promoción de actividades delictivas que puedan dañar a personas o propiedades".
Por su parte, el comisario jefe de la Garda, Drew Harris, prometió hoy reforzar la presencia policial en las calles después de la "enorme destrucción" provocada por "una turba desenfrenada" y "radicalizada" durante los peores disturbios en "décadas".
"Vamos a llevar a cabo una revisión fundamental de nuestras tácticas de orden público, dado el alto nivel de violencia. Habrá una organización y movilización significativa para evitarla", indicó hoy el máximo responsable policial.
Harris destacó que el cuerpo ha iniciado sendas "investigaciones formales" sobre el apuñalamiento múltiple y los disturbios, que resultaron en la detención de 34 personas, 32 de las cuales comparecen hoy ante un juez acusados de varios delitos.
La Garda confirmó que desplegó "más de 400" uniformados, entre los que figuraban unos 250 antidisturbios, en el centro de la capital para "hacer frente a incidentes de orden público y desórdenes violentos graves en desarrollo y en evolución".
Según el cuerpo, los violentos, entre 200 y 400 personas -según las autoridades-, llegaron a quemar siete vehículos, incluidos tres autobuses urbanos y un tranvía, mientras que 11 vehículos policiales "sufrieron graves daños".
Asimismo, un "número de agentes resultaron heridos" y 13 establecimientos "fueron atacados y sustancialmente dañados", sobre todo tiendas de deportes, precisó Harris.
"No podemos permitir entregar la ciudad a matones, saqueadores y pirómanos", observó el comisario jefe, quien agregó que la niña de cinco años herida sigue "en estado muy grave", mientras la mujer está "grave".
Dublín, 24 nov (EFE).- Un total de 34 personas han sido detenidas en Dublín tras los disturbios de anoche provocados por una turba, después de que cuatro personas, tres de ellas menores, fueran apuñaladas, informó este viernes la Garda (policía irlandesa).
El comisario de la Garda, Drew Harris, dijo que un agente policial resultó gravemente herido y que "muchos otros miembros resultaron con heridas" por los actos vandálicos.
Después del apuñalamiento del jueves, por el que una niña de 5 años está en estado grave, le siguió por a última hora de la tarde una manifestación de grupos antiinmigración en los alrededores de la escena del incidente, al norte de la capital.
El responsable de la Garda indicó hoy que 13 tiendas sufrieron daños importantes o fueron objeto de saqueos y 11 vehículos policiales resultaron dañados durante los disturbios de anoche.
La violencia empezó después del ataque de ayer frente a una escuela en Parnell Square East, en el norte de la ciudad.
Algunos manifestantes, identificados como de "extrema derecha", lanzaron bengalas y fuegos artificiales y otros arrojaron sillas y taburetes saqueados de bares y restaurantes.
Las protestas obligaron al cierre de varias calles, mientras que los servicios públicos de autobuses, ferrocarril y tranvía también suspendieron algunas rutas.
El presidente irlandés, Michael D. Higgins, expresó anoche su preocupación por las víctimas del "horroroso" apuñalamiento múltiple, al tiempo que elogió la actuación policial durante los disturbios.
De los cuatro apuñalados ayer, además de la gravedad de una niña de cinco años, una mujer de unos 30 años, trabajadora del centro escolar, recibe tratamiento por "lesiones graves", pero los otros dos menores están fuera de peligro.
Dublín, 24 nov (EFE).- El primer ministro irlandés, Leo Varadkar, aseguró este viernes que los graves disturbios ocurridos la pasada noche en Dublín tras un apuñalamiento múltiple han "avergonzado" al país y advirtió de que hay más protestas programadas a través de las redes sociales para este fin de semana.
Varadkar confirmó que un total de 34 personas han sido detenidas tras los enfrentamientos con la Policía, en los que varios agentes resultaron heridos por los actos de violencia orquestados por grupos de extrema derecha.
De los cuatro apuñalados ayer, además de la gravedad de una niña de cinco años, una mujer de unos 30 años, trabajadora del centro escolar, recibe tratamiento por "lesiones graves", pero los otros dos menores están fuera de peligro.
La Policía irlandesa (Garda) ha detenido al supuesto agresor, que también resultó herido por arma blanca tras ser reducido por viandantes, y aunque no ha informado aún sobre su identidad o el motivo del ataque, se sabe que no ha nacido en este país pero tiene pasaporte irlandés.
Varadkar habló hoy de "los dos terribles" sucesos que sacudieron la capital el jueves, en referencia al apuñalamiento de "niños inocentes" y el "ataque contra nuestra sociedad" perpetrado por unos 500 "delincuentes" en pleno centro de la ciudad.
"Como primer ministro, quiero decirle a una nación que está inquieta y asustada que esto no nos representa", declaró el líder irlandés, quien elogió la respuesta de ciudadanos de "diferentes nacionalidades" para reducir al atacante, a los que calificó de "auténticos héroes de Irlanda".
"Ayer, algunos decidieron que la mejor manera de responder a ese terrible suceso era tomar las calles de Dublín para aterrorizar, intimidar, saquear y destruir", lamentó Varadkar, de origen indio y abiertamente gay.
El jefe del Ejecutivo irlandés, de coalición entre democristianos, centristas y verdes, consideró que los disturbios, "los peores en décadas", fueron un "suceso excepcional" y avanzó que la Garda reforzará la presencia en las calles durante los próximos días para evitar nuevos altercados.