Tijuana (México), 23 nov (EFE).- Familias y personas migrantes que se encuentran en albergues de la fronteriza ciudad de Tijuana, a la espera de poder obtener citas para sus procesos de asilo en Estados Unidos, celebraron este jueves el tradicional 'Thanksgiving' o Día de Acción de Gracias, con una comida ofrecida por la migrante deportada Esther Morales en su restaurante conocido como La Antigüita.
Madres de familias, mujeres embarazadas, hombres que viajan en solitario, niñas y niños, todos ellos actualmente habitantes del albergue Espacio Migrante, que se encuentra a un kilómetro del puerto fronterizo de San Ysidro, degustaron del tradicional pavo que se sirve en esta fecha, además de los tradicionales tamales mexicanos elaborados por la propia anfitriona.
Cocinera mexicana y activista detrás del 'Thanksgiving'
Esther Morales Guzmán, originaria del estado mexicano de Oaxaca, además de migrante y cocinera, es activista desde hace 11 años, tras ser deportada en definitiva de EE.UU. y creado su restaurante, en el que se dedica a brindar comida caliente y gratuita a los migrantes en tránsito y personas en situación de vulnerabilidad.
Como cada año, en esta fecha se dedica a invitar a migrantes que están en los albergues para que pasen a comer y degustar de alimentos en compañía de otros migrantes, todo ello como una forma de compartir la tradición y de hacerlos sentidos acogidos en un lugar que no es el suyo.
“Viví más de 20 años en Estados Unidos y adopté y me traje esa tradición; allá la celebré muchas veces con mi familia y ahora que estoy aquí cada año se hace una comida y se invita a un albergue, generalmente yo voy a ellos a ofrecer comida, pero en días como hoy me gusta que vengan y que estemos aquí en el negocio en un rato agradable”, dijo en entrevista con EFE.
Agregó que llevar a los migrantes, procedentes de diversos países y de otros estados de México, es como un mensaje para compartirles algo que también se celebra aquí, gracias a la condición geográfica de la fronteriza ciudad de Tijuana y el flujo de personas que van hacia Estados Unidos.
“Es un mensaje de celebración, para decirles y a los que van para allá (a EEUU) que allá se celebra, porque muchos obviamente no lo saben; y los que están repatriados y traen el recuerdo de la celebración con sus familias, pues para que no se sientan tan agüitados y tan tristes y vengan a disfrutar del rico pavo como alguna vez lo hicieron allá”, resaltó.
Frontera con esperanza para los migrantes
A propósito de los caminos sinuosos y las situaciones adversas por las que se enfrentan los migrantes, como fue su caso, principalmente entre aquellos que esperan largos meses a que sus citas para el asilo sean aceptadas, la activista destacó que, pese a ello, Tijuana “es una frontera con esperanza” donde se acoge a los migrantes.
“Pero el mensaje, pues, es que no pierdan la esperanza, porque todo aquel que está esperando su cita le va a ir bien; mientras tanto que se sientan bien aquí, que degusten sus alimentos y que se sientan libres un momento de lo que viven en los albergues”, concluyó.
Uno de los migrantes que asistió a la celebración, originario de Guerrero y que prefirió el anonimato por cuestiones de seguridad, compartió con EFE su agradecimiento al personal de Espacio Migrante por todas las atenciones que le brindan en el albergue, así como por darles la oportunidad de tener estos momentos que para ellos son de suma importancia y tranquilidad.
“Vengo con mi esposa y venimos de Guerrero, salimos porque queremos llegar a EE.UU. y la verdad es muy lindo ver que sí hay gente que nos apoya a los migrantes, más que nada porque venimos de bajos recursos y que nos den esta oportunidad de convivir”, concluyó.