Ciudad de México, 22 nov (EFE).- Con la mirada puesta en La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2023 (COP28), ambientalistas señalaron este miércoles que México puede, de manera costo-efectiva, reducir un 30 % sus emisiones de gases para 2030, según la Iniciativa Climática de México (ICM).
Junto con las contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC), el ICM analizó más de 80 indicadores, identificando que el sector petróleo y gas, abarcado por 18 medidas, tiene el potencial de reducir sus emisiones en un 50 % de manera incondicional en comparación con la línea base.
“Para que tengamos una ruta que nos lleve a las emisiones netas cero para el año 2050, necesitamos la reducción de la demanda de producción de combustibles en todos los sectores, además del cumplimiento de la regulación y la implementación de quemadores eficientes”, destacó de manera virtual Luisa Sierra, directora del programa de energía del ICM.
Además, uno de los compromisos a corto plazo del Observatorio Mexicano de Emisiones de Metano (OBMEM) es la reducción de este gas, considerado "clave" en la lucha contra la crisis climática.
En México, según datos del ICM, las emisiones de metano en 2019 alcanzaron las 176 millones de toneladas, equivalentes a dióxido de carbono (MTCO2e), representando el 24 % del total de contaminantes.
Sierra advirtió que el metano tiene un impacto 86 veces mayor en el calentamiento global que el dióxido de carbono (CO2) durante los primeros 20 años, lo que puede desencadenar diversas enfermedades como el asma o, incluso, provocar la muerte prematura.
Juan Méndez, jefe de Incidencia Pública de ‘Nuestro Futuro’, destacó que las emisiones de metano contribuyen al 30 % del calentamiento global actual.
“El metano es una amenaza invisible que existe generando más Co2 y provocando problemas respiratorios, afecciones cardiovasculares, trastornos neurológicos y psicológicos y anomalías genéticas y congénitas. No hay tiempo que perder en la lucha contra el cambio climático”, remarcó Méndez.
Para el OBNEM, la COP28, que comenzará el 30 de noviembre en Dubái, ciudad de los Emiratos Árabes Unidos, representa una oportunidad crucial para destacar la importancia de abordar el problema del metano.
“La reducción de emisiones de metano es fundamental para construir justicia climática, como en México, ya que es necesario que se consiga más tiempo en la lucha contra el cambio climático y esto puede lograrse combatiendo las emisiones de metano”, expresó Camila Campillo, jefa de vinculación de ‘Nuestro Futuro’.