Washington, 20 nov (EFE).- El presidente estadounidense, Joe Biden, cumple este 20 de noviembre 81 años, una edad con la que pretende presentarse a la reelección y que afecta negativamente a su popularidad, que estos días está más baja que nunca.
El año pasado, Biden se convirtió en el primer octogenario en ocupar la Casa Blanca y, si todo transcurre según lo previsto y el Partido Demócrata le elige de nuevo como candidato, será el aspirante a la presidencia de mayor edad en la historia de Estados Unidos.
Aunque hay un par de aspirantes sin posibilidades reales de resultar elegidos, el Partido Demócrata ha hecho una única apuesta por el mandatario con el razonamiento de que si en 2020 logró ganar a Donald Trump, este 2024 podrá hacerlo de nuevo.
Pero el tiempo corre en contra de Biden doblemente, pues su avanzada edad hace mella en las encuestas y podría tener graves consecuencias para el partido en las urnas. Si gana las elecciones, comenzará la presidencia con 82 años y la acabará con 86.
Pese a que solo se lleva tres años con el expresidente Donald Trump, el precandidato favorito del Partido Republicano, Biden es percibido como más anciano por los ciudadanos, una imagen que se ha potenciado por los tropiezos y despistes que ha protagonizado el mandatario en algunas ocasiones.
Según una encuesta publicada en agosto pasado por el Centro de Investigación sobre Asuntos Públicos AP-NORC, el 77 % de los encuestados, republicanos y demócratas, piensan que Joe Biden es demasiado mayor para desempeñar efectivamente el cargo de presidente.
Cuando se les pregunta sobre la primera palabra que les viene a la mente cuando piensan en cada candidato, el 26 % citó la edad de Biden y el 15 % mencionó palabras asociadas con ser lento y estar confundido.
Según el termómetro de popularidad de FiveThirtyEight, el 55,4 % de los encuestados desaprueba a día de hoy las actuaciones de Biden, una cifra que va en aumento a un ritmo similar a cómo está cayendo el índice de aprobación: hoy sólo el 39,2 % lo aprueba.
Otro problema que puede empeorar la imagen de Biden es la guerra de Israel. Según una encuesta del Instituto Árabe-Americano publicada hace unas semanas, el apoyo al presidente Biden entre los árabes estadounidenses, votantes cruciales en los estados electorales en disputa, ha caído a solo el 17%.
La última encuesta de NBC News publicada este domingo muestra que el índice de aprobación del presidente ha disminuido al nivel más bajo de su presidencia (40 %), principalmente porque los votantes desaprueban su manejo de la política exterior y la guerra entre Israel y el brazo armado de Hamás.
Este conflicto está afectando además al votante joven. De entre los encuestados de 18 y 34 años, el 70 % desaprueba el manejo de la guerra por parte de Biden, una cifra que era del 46 % el pasado mes de septiembre, en la anterior encuesta publicada.
Con este panorama, son muchos los expertos que señalan lo arriesgado de que el Partido Demócrata haya apostado solo por un candidato.
"Si algo catastrófico le sucede a su salud, van a tener que recurrir a un plan B, pero no creo que exista", apunta a EFE Christopher A. Cooper, director del Instituto de Políticas Públicas de la Universidad Western Carolina.
Incluso si el aparato del Partido Demócrata tiene un plan, "los votantes demócratas podrían no estar de acuerdo", señala.
Aún así, todo puede suceder durante el próximo año y no hay que olvidar que el Partido Republicano también tiene escollos que sortear, como los cuatro juicios penales que tendrá que enfrentar Trump y que podrían restarle votos o dificultar su participación en los procesos de primarias y caucus.
A tres días de la festividad más importante del año en Estados Unidos, Acción de Gracias, en la Casa Blanca se celebró este lunes el tradicional indulto del pavo, en el que participó Biden.
Ante dos enormes pavos llamados Liberty y Bell, el presidente recordó a todos los presentes que es su cumpleaños e hizo gala de su particular sentido del humor: "Qué difícil es cumplir 60".
Paula Escalada Medrano