Kiev/Moscú, 18 nov (EFE).- Ucrania persiste en sus planes de avanzar lo máximo posible en el frente de Jersón antes de la llegada del invierno pese a que el mal tiempo ya causa estragos en ambos bandos en el campo de batalla.
"A medida que el clima invernal se vuelve más frío en el este de Ucrania, hay pocas perspectivas inmediatas para unos cambios importantes en primera línea", reza el última informe de la inteligencia británica, publicado este sábado.
Según los militares británicos, en la última semana los ataques más significativos tuvieron lugar alrededor de Kúpiansk, Avdivka y la orilla izquierda del río Dniéper, donde las fuerzas ucranianas lograron establecerse pese a la resistencia rusa.
No obstante, en los últimos días ninguna de las partes ha podido obtener ningún "progreso sustancial" en los mencionados áreas.
Pese al obstáculo del mal tiempo y los bombardeos rusos, las fuerzas ucranianas tratan de afianzarse en la orilla izquierda del Dniéper.
Según fuentes rusas, las tropas ucranianas que lograron cruzar el río, están actualmente "bloqueadas".
Además, el Ministerio de Defensa de Rusia informó hoy en su parte diario de intensos ataques que llevan a cabo sus fuerzas contra los soldados ucranianos en torno al río Dniéper.
Estos bombardeos, según Moscú, han causado al menos 75 muertos en filas del ejército ucraniano.
El Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania informó, a su vez, de haber repelido "más de 10 ataques" rusos en el lado izquierdo del río y destinados a la recuperación de las posiciones perdidas.
Otros 50 ataques fueron rechazados en el frente este, donde continúan intensos combates por el control de Bajmut, Avdivka y Márinka.
Los combates en el terreno coinciden con los ataques de drones que Rusia reanudó en Ucrania.
Así, la Fuerza Aérea ucraniana informó que había repelido la pasada noche 29 de 38 ataques rusos con drones kamikaze, uno de los cuales causó daños en una infraestructura energética en Odesa, según informaron este sábado las fuerzas armadas en diferentes mensajes.
Los ataques se produjeron desde el norte y el sudeste y emplearon drones de tipo Shahed, de fabricación iraní, que fueron lanzados en varias oleadas, informó la Fuerza Aérea en un mensaje de Telegram.
Un total de 29 de los drones suicidas pudieron ser destruidos antes de impactar, agregó el mensaje.
En la región de Odesa (sur), uno de los vehículos no tripulados impactó en una instalación de la infraestructura energética, causando daños en un edificio administrativo, afirmaron las Fuerzas de Defensa del Sur de Ucrania.
"Estalló un incendio que fue rápidamente contenido. Un empleado civil que resultó herido fue hospitalizado", añadió el mensaje.
Otro dron causó un incendio en un una infraestructura sin precisar en la región de Zaporiyia (sur), según informaron los Servicios de Emergencia del Estado de la Región de Zaporiyia, el cual fue extinguido con rapidez.
Entretanto, Rusia admitió hoy haber atacado un depósito de combustible en la región ucraniana de Odesa en el marco de una jornada de ataques masivos contra instalaciones militares del enemigo.
"Cerca de la localidad de Vyhoda de la región de Odesa fue destruido un depósito de combustible de las Fuerzas Armadas ucranianas", señala el parte castrense.
Además, un almacén con munición para las fuerzas ucranianas fue golpeado en la región de Jarkiv (este), agregaron en el Ministerio de Defensa.
También fueron atacados depósitos de armas en las regiones de Kiev, Dnipropetrovsk (centro) y Zhitomir (norte).
En total, Rusia reconoció haber llevado ataques en más de un centenar de localidades durante las últimas 24 horas.