Washington, 13 nov (EFE).- Tras el reciente abandono de la carrera presidencial republicana del exvicepresidente Mike Pence y la última retirada, la del senador Tim Scott, cinco figuras aspiran a convertirse en el candidato conservador de las presidenciales estadounidenses de 2024, una lista que se reduce pero que sigue encabezada por Donald Trump (2017-2021).
Y es que, según todas las encuestas que se publican cada semana, el expresidente continúa siendo el preferido de los votantes del Partido Republicano.
En la difundida por CBS News la semana pasada, Trump aparecía como el claro favorito con el 61 % de las intenciones de voto, seguido de Ron DeSantis (18 %), Nikki Haley (9 %), Vivek Ramaswamy (5 %) y Chris Christie (2 %), unas cifras muy similares a otra encuesta publicada por CNN en las mismas fechas. En ambas aparecía todavía Scott con el 3 %-4 %.
El senador por Carolina del Sur, de 58 años, era el único afroamericano de los aspirantes y su abandono, por sorpresa, se produjo la noche del domingo, dos semanas después de que el exvicepresidente (en el Gobierno de Trump) Mike Pence dejara también su lucha.
"Los votantes, que son las personas más notables del planeta, han sido muy claros al decirme: 'Ahora no, Tim'", afirmaba Scott, quien no sobrepasó nunca el 4 % de la intención de voto en los sondeos de los últimos meses.
¿Modificará algo su abandono, o los que puedan venir durante las próximas semanas, la carrera presidencial? En opinión de Aaron Kall, experto en Ciencias Políticas de la Universidad de Míchigan, la salida de Scott podría beneficiar levemente a Haley "porque ambos son del estado de Carolina del Sur y comparten seguidores".
"Pero la ventaja de Trump es tan grande, tanto a nivel nacional como en los primeros estados que celebran primarias, que no creo que vaya a cambiar la trayectoria general", afirma a EFE.
A juicio del profesor de Ciencias del Comportamiento de la Universidad de Ohio Paul A. Beck, "dado el liderazgo que ahora disfruta Trump es muy poco probable que se le pueda negar la nominación a la presidencia". Para marzo próximo, señala a EFE, "ya sabremos que Trump será el candidato republicano".
Todo ello es fruto de que, apunta a EFE Mark Caleb Smith, director del Centro de Estudios Políticos de la Universidad Cedarville, ha ejercido "una influencia dramática" sobre el Partido Republicano, que "ha hecho muy difícil que otro aspirante dé un paso al frente y lo desafíe directamente".
"Ha redefinido lo que significa conservador, lo que significa ser republicano y lo que Estados Unidos significa para la gente", señala.
Aún así, a diferencia de 2020, cuando Trump arrancó las primarias casi en solitario, con candidatos que apenas tenían apoyos, los cuatro saben que tienen que estar ahí porque este no va a ser un año de campaña cualquiera.
Y es que paralelamente a la carrera presidencial, el expresidente tendrá que enfrentar cuatro juicios penales: por los pagos ilegales a la actriz Stormy Daniels; por el mal manejo de documentos clasificados; por intentar manipular los resultados de las elecciones de 2020 en Georgia y por su presunta injerencia para revertir el resultado electoral de 2020, caso que lo relaciona con el asalto al Capitolio.
Aunque por el momento los procesos parecen no influirle negativamente, 2024 será un año de gran incertidumbre por lo que, presumiblemente, los candidatos aguantarán al menos hasta el primer caucus, que se celebrará en Iowa el próximo 15 de enero.
"Todos quieren estar en el lugar correcto en el momento adecuado en caso de que algo inesperado suceda, por los problemas legales de Trump o porque tiene 77 años. Quieren ser la alternativa más viable y creíble si algo pasa", señala Kall.
¿Quién podría ser esta figura alternativa? Mientras que las expectativas en torno al gobernador de Florida, Ron DeSantis, comenzaron muy altas al inicio de su campaña, a lo largo de los meses se ha deshinchado.
Mientras, la popularidad de Haley, exgobernadora de Carolina del Sur y exembajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, va en aumento y, consciente de ello, llevará a cabo un fuerte empujón de cara a las primarias de Iowa y a las de New Hampshire: planea invertir 10 millones en publicidad en los dos estados, los primeros que celebrarán comicios internos.
Todo ello para posicionarse de cara a las primarias de Carolina del Sur, su estado natal y el tercero en el calendario de nominaciones.
"Creo que la persona número uno en este momento que va a desafiar a Trump será Haley", apunta Smith.
"Es una candidata capaz. Tiene una cantidad significativa de experiencia y creo que es un oponente creíble que puede atraer suficiente apoyo para derrotarlo. Aunque ahora no pueda, si las cosas cambian ya se verá", señala.
Paula Escalada Medrano