San Cristóbal de las Casas (México), 9 nov (EFE).- La activista Irinea Buendía, madre de Mariana Lima Buendía, víctima de feminicidio promueve una ley en México que exige que todas las muertes violentas de mujeres se investiguen con perspectiva de género y no queden impunes.
“He recorrido 22 estados para que conozcan los parámetros, los estándares, las leyes, los criterios nacionales e internacionales que están plasmados en esa sentencia Mariana Lima Buendía, emitida por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de México”, expresó este jueves a EFE la activista en una conferencia en el estado de Chiapas, sureste de México.
La iniciativa propone reformar el Código Penal Federal y del Estado de México, por ende el Código Nacional de Procedimientos Penales, la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
La activista señaló a EFE que este trabajo de años abre la posibilidad de brindar justicia a esas mujeres que cayeron en manos de un feminicida, es decir, es “una propuesta de iniciativa de ley como un parámetro nacional, para juzgar todo los feminicidios, incluidos suicidios y accidentes con perspectiva de género”.
Esta propuesta de ley busca obligar a todas las autoridades a aplicar los parámetros que establece la sentencia que emitió la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) el 25 de marzo de 2015, la cual determinó que todas las muertes violentas de mujeres sean investigadas sin ser revictimizadas.
Dicha propuesta también estipula sancionar las omisiones de los servidores públicos que obstruyan la justicia, imponiendo pena de prisión de tres a ocho años y una multa económica.
En cuanto al Código Nacional de Procedimientos Penales se propone que al Ministerio Público, la policía, jueces y magistrados "se les obligue a investigar con perspectiva de género, con la debida diligencia para acreditar que las muertes de mujeres y niñas se cataloguen como feminicidio y no homicidio calificado, incluidos los suicidios y accidentes”.
Caso Mariana Lima Buendía
Mariana Lima Buendía, de 28 años, fue víctima de feminicidio por parte de su esposo Julio César Hernández Ballinas, comandante de la Policía Judicial del municipio de Chimalhuacán, Estado de México, el 28 de junio de 2010.
Luego de 13 años fue declarado culpable y condenado a 70 años de prisión, pena máxima estipulada para el caso de feminicidio y es el primero que emite una sentencia de este tipo la SCJN.
Irinea Buendía, madre de la víctima de feminicidio, relató que el día de los hechos Hernández Ballinas afirmó que la joven se había suicidado, sin embargo, esta versión no fue validada por sus familiares, debido a los antecedentes de violencia que había sufrido la víctima y sobre todo a la inconsistencia que presentaba la escena del crimen.
Fue el 27 de junio, un día antes de su muerte, que Mariana advirtió a su madre sobre la violencia física que vivió durante los 18 meses posteriores al día de su matrimonio, por lo que decidió terminar la relación y regresó a casa de sus padres.
Por su parte, Irinea realizó una denuncia ante las autoridades correspondientes para dejar evidencia de la situación que vivía su hija, mientras que Mariana también hizo lo mismo, pero el día que regresó a casa de su pareja para recoger sus pertenecías, fue asesinada
A pesar de que existían estos antecedentes, Hernández Ballinas permaneció en libertad, mientras que Irinea y su esposo iniciaron un largo caminar en busca de justicia, que derivó en una nueva investigación y en la que el tribunal ordenó que el caso se reabriera para que fuera investigado como feminicidio.