Naciones Unidas, 6 nov (EFE).- Francia se mostró este lunes en la ONU favorable a "una tregua humanitaria inmediata (...) que conduzca a un alto el fuego", pero Estados Unidos reconoció que todavía "hay desacuerdos" al respecto.
Tras una sesión de consultas del Consejo de Seguridad solicitada por China y Emiratos Árabes, el embajador francés Nicolas de Rivière tomó la palabra ante los periodistas y dijo que "dada la gravedad de la situación humanitaria en Gaza, Francia llama a una tregua humanitaria inmediata", marcando así distancias con sus aliados Estados Unidos y el Reino Unido.
"El esfuerzo humanitario que ahora tiene lugar es insuficiente -añadió De Rivière- Necesitamos una tregua sostenible y duradera".
Sin embargo, la posibilidad de un acuerdo al respecto fue casi de inmediato enfriada por el representante estadounidense Robert Wood, quien reconoció que "hay desacuerdos dentro del Consejo sobre si es aceptable (la cuestión) de las pausas humanitarias".
"Estamos buscando un lenguaje común sobre esto, pero hay desacuerdos", insistió, y dijo que las prioridades ahora son facilitar "la situación humanitaria" -y citó el paso de los camiones hacia Gaza- y, en paralelo, propiciar la liberación de los rehenes.
Wood dijo que en la administración estadounidense "hay mucha gente trabajando duro" por mejorar la situación de los civiles tanto en Gaza como en Israel, y afirmó que su país "lamenta todas las vidas perdidas", pero en ningún momento se dijo partidario del alto el fuego, una idea que el gobierno de Joe Biden por el momento rechaza, en consonancia con su aliado Israel.
También tomaron la palabra los embajadores de China, Zhang Jun, y de Emiratos Árabes, Lana Nusseibeh, que coincidieron en la necesidad de un alto el fuego urgente pero reconocieron que está todavía lejos el consenso dentro de los quince miembros del Consejo de Seguridad.
Nusseibeh dijo que la mayor discrepancia en este momento es "qué es lo que se puede lograr en este momento" en el terreno, y aseguró que los debates continúan entre los miembros para llegar a alguna suerte de acuerdo, siendo esta la máxima prioridad del Consejo.
El Consejo ya ha fracasado en cuatro ocasiones a la hora de aprobar una resolución que imponga a las partes algún tipo de tregua o incluso pausa humanitaria, debido a los vetos cruzados de Estados Unidos, por un lado, y de Rusia y China por otro.