París, 2 nov (EFE).- El seleccionador de Francia, Didier Deschamps, negó este jueves ante los diputados franceses toda discriminación de Karim Benzema al excluirle del último Mundial de Catar, y aseguró que su único criterio para escoger a un jugador es el deportivo.
"Mis elecciones son puramente deportivas, no tengo otros criterios", afirmó Deschamps, durante su intervención en una comisión parlamentaria acerca de los abusos en el mundo del deporte profesional en Francia, que investiga casos de racismo, discriminación y abusos sexuales.
El que fuera campeón mundial en 2018 como entrenador y en 1998 como jugador señaló que Benzema es "francés como el resto de los jugadores de la selección" y afirmó que el hecho de que haya binacionales (el exmadridista es también argelino) no cambia nada.
Los que disponen de doble nacionalidad "tienen libertad para elegir un país u otro, eso ha sido siempre así", agregó.
El seleccionador francés fue cuestionado por la diputada de izquierdas Sabrina Sebaihi, de La Francia Insumisa (LFI), sobre los motivos que llevaron a Deschamps a excluir a Benzema de la selección en el último mundial de Catar.
El entorno del Balón de Oro de 2022 dio a entender entonces que los motivos de su salida del equipo no fueron deportivos, mientras que Deschamps ha insistido en que el detonante fue únicamente la lesión muscular que se produjo pocos días antes del inicio del torneo.
"Ya hablé de eso, en cada situación no hay una sola verdad, sino varias versiones de la misma. Lo que pasó ya lo expliqué. Si quieren que dé más detalles, puedo mostrar intercambios de mensajes SMS, pero no creo que ayude a que las cosas avancen", opinó el seleccionador, quien acumula un tenso historial de desencuentros con Benzema.
Deschamps ya había descartado de la selección de Francia durante seis años (2015-2021) al atacante francés (entonces estrella en el Real Madrid) por su implicación en el chantaje a su entonces colega en los Bleus Mathieu Valbuena.
En 2016, poco antes de la Eurocopa que se celebró en Francia, Benzema acusó al seleccionador de "haber cedido a las exigencias de una parte racista de Francia" por descartarle.
Unos días después, apareció una pintada en una casa que Deschamps tiene en Bretaña en la que se le acusaba de "Racista".
"No lo sé si esta pintada tuvo que ver o no con su no convocatoria (...). Lo que sé es que sus autores no fueron identificados", dijo ante los diputados el técnico francés, quien fue él mismo el que evocó ese episodio cuando le cuestionaron sobre el racismo en el fútbol.