Nairobi, 31 oct (EFE).- El presidente de Kenia, William Ruto, recibió hoy en la State House de Nairobi (sede de la Presidencia keniana) a los reyes de Reino Unido, Carlos III y Camila, que iniciaron así un viaje de cuatro días a la excolonia británica, donde muchos exigen una disculpa por los agravios históricos de Londres.
Tras la llegada de los reyes a bordo de un Land Rover Discovery, uno de los vehículos que usa la Embajada de Reino Unido en Nairobi, la ceremonia empezó con una salva de 21 cañonazos que retumbaron con fuerza por toda la State House e incluso llenaron de humo uno de los rincones de su extenso jardín.
Decenas de soldados de la guardia de honor keniana, vestidos con sus característicos uniformes rojos, esperaron pacientemente mientras Carlos III recorría la alfombra roja dispuesta para inspeccionarlos y la banda de música presidencial tocaba los himnos de Kenia y Reino Unido.
Los músicos también llegaron a tocar “Jambo Bwana / Hakuna Matata” (“Hola, señor / No hay problema”, en suajili), una famosísima canción usada en Kenia para que los turistas aprendan algunas palabras básicas de uno de los idiomas oficiales del país y con la que la banda presidencial ameniza a menudo los eventos en los que participa Ruto.
Después de que Nairobi amaneciese este martes en medio de una intensa tormenta que duró varias horas, la lluvia respetó la llegada del monarca e incluso las nubes empezaron a abrirse en ese momento.
A continuación, bajo la atenta mirada de Ruto, Carlos III plantó un árbol en los jardines del recinto presidencial y ambos mandatarios dialogaron sonrientes durante unos minutos antes de entrar en el edificio principal de la State House para mantener una reunión a puerta cerrada.
Les siguieron unos metros por detrás la reina Camila y la primera dama keniana, Rachel Ruto, que también conversaron.
Está previsto que Carlos y Camila se reúnan en la capital keniana con emprendedores tecnológicos y jóvenes líderes de los sectores de las artes, los medios de comunicación y la conservación.
Además, visitarán las oficinas del Programa de la ONU para los Asentamientos Humanos (ONU Hábitat) y del Programa de la ONU para el Medioambiente (PNUMA), las únicas agencias de la organización que tienen su sede central en el sur global.
Aún en Nairobi, acudirán a un cementerio de soldados fallecidos al luchar en las fuerzas británicas durante las dos guerras mundiales y harán un safari en el parque nacional de la ciudad.
En la segunda parte de su viaje, en la urbe costera de Mombasa, los reyes presenciarán una simulación de desembarco de marines kenianos entrenados por militares británicos en la base naval de Mtongwe y se reunirán con líderes religiosos, entre otros actos.
Por razones de seguridad, poco más se sabe del programa de actividades previstas para Carlos y Camila.
Al anunciar la visita, el palacio de Buckingham destacó que los reyes reconocerán "los aspectos más dolorosos de la historia compartida" entre Reino Unido y Kenia, mientras el país africano se prepara para celebrar el próximo 12 de diciembre los sesenta años de su independencia en 1963.
Así, "su Majestad dedicará tiempo durante su visita para profundizar su comprensión de los agravios sufridos" durante el estado de Emergencia (1952-1960), declarado frente a la lucha emprendida por la organización guerrillera conocida popularmente como Mau Mau, adelantó el palacio.
Buckingham no reveló, sin embargo, si los reyes pedirán abiertamente perdón a los kenianos, algo que han reclamado comunidades de diferentes puntos del país desde que se anunció el viaje.
Esta es la primera visita como rey de Carlos III, de 74 años, a un país de la Commonwealth (mancomunidad de excolonias y protectorados británicos) desde que sucedió a su madre, Isabel II, el 8 de septiembre de 2022, que falleció a los 96 años y fue la monarca británica que más tiempo ocupó el trono.
Carlos, sin embargo, ha realizado tres visitas oficiales antes a este país africano, en 1971, 1978 y 1987.
Kenia tiene un significado especial para la familia real británica ya que Isabel II se encontraba de viaje precisamente en este país cuando la muerte en 1952 de su padre, Jorge VI, dio inicio a su reinado.
Nairobi, 31 oct (EFE).- El rey Carlos III del Reino Unido hizo hoy una ofrenda floral en los Jardines de Uhuru en Nairobi, donde Kenia declaró la independencia en 1963 con el simbólico gesto de arriar entonces la bandera británica e izar la keniana.
En el primer día de su visita de Estado a esta excolonia británica, Carlos III depositó una corona de rosas blancas y lilas ante la Tumba del Soldado Desconocido bajo la atenta mirada del presidente de Kenia, William Ruto.
El monarca, que llegó anoche a Nairobi acompañado de la reina Camila, presentó así sus respetos a los héroes caídos, militares y civiles, de Kenia en un monumento marcado por una llama eterna.
El tributo floral del rey tenía una nota escrita a mano que decía: "En recuerdo agradecido - Charles R.".
Carlos caminó después hasta el Árbol de Mugomo, una higuera plantada en el lugar exacto de la declaración de independencia de Kenia, en el que se arrió la bandera del Reino Unido y se izó la primera bandera de Kenia el 12 de diciembre de 1963.
El rey también se reunió con jóvenes emprendedores en la Biblioteca de Eastlands en Embakasi, en la capital, donde habló del tiempo lluvioso, casi londinense, con el que Nairobi recibió a la pareja real.
"Les puedo asegurar que las lluvias son una bendición, anoche llovió", comentó el monarca, citado por medios locales.
"Su presidente (Ruto) mencionó que su objetivo es plantar 59 mil millones de árboles, eso es algo bueno", agregó Carlos, conocido por su entusiasta defensa del medio ambiente, quien también visitó unos invernaderos de una granja urbana moderna en la que mostró gran interés por los cultivos.
Anteriormente, los reyes británicos recibieron una cálida bienvenida por Ruto y su esposa, Rachel Ruto, en la State House de Nairobi (sede de la Presidencia keniana), inaugurando oficialmente su visita de cuatro días.
Esta noche Carlos y Camila serán agasajados con un banquete de Estado en una ceremonia en Nairobi, en la que se espera que el rey pronuncie un discurso en el que previsiblemente aludirá a los agravios del colonialismo británico, denunciados por varias comunidades kenianas antes de su llegada al país africano.
Al anunciar la visita, el palacio de Buckingham destacó que el monarca reconocerá "los aspectos más dolorosos de la historia compartida" entre Reino Unido y Kenia.
"Su Majestad dedicará tiempo durante su visita para profundizar su comprensión de los agravios sufridos" durante el Estado de Emergencia (1952-1960), declarado frente a la lucha emprendida por la organización guerrillera conocida popularmente como Mau Mau, adelantó el palacio.
Sin embargo, Buckingham no reveló si los reyes pedirán abiertamente perdón a los kenianos.
Esta es la primera visita como rey de Carlos III, de 74 años, a un país de la Commonwealth (mancomunidad de excolonias y protectorados británicos) desde que el 8 de septiembre de 2022 sucedió a su madre, Isabel II, que falleció a los 96 años y fue la monarca británica que más tiempo ocupó el trono.
Carlos, sin embargo, ha realizado tres visitas oficiales antes a este país africano, en 1971, 1978 y 1987.
Kenia tiene, además, un significado especial para la familia real británica, ya que Isabel II se encontraba de viaje en este país cuando la muerte en 1952 de su padre, Jorge VI, dio paso a su reinado.