Madrid, 11 oct (EFE).- El Comité Olímpico Internacional (COI) se reúne este jueves en Bombay (India), primero su Ejecutiva y desde el domingo la 141 Sesión, con el reto de exhibir la fuerza pacificadora del deporte en un mundo en conflicto, a apenas nueve meses de los Juegos de París.
Cuando aún no se ha tomado oficialmente una decisión sobre la participación en esos Juegos de los deportistas rusos y bielorrusos, excluidos de las competiciones tras la invasión de Ucrania y readmitidos ahora como neutrales, el conflicto entre Israel y las milicias de Hamás añade más incertidumbre a un panorama político que, se quiera o no, siempre ejerce su incidencia en el deporte.
Los atletas de Rusia y Bielorrusia disputan ya muchos torneos preolímpicos, sin sus símbolos nacionales, pero siguen fuera de deportes emblemáticos como el atletismo o la gimnasia.
Pese a todo, el español Juan Antonio Samaranch, vicepresidente del COI, dijo a EFE antes de viajar a Bombay que el organismo tiene "cada vez más esperanzas de que los Juegos Olímpicos de París se puedan celebrar con deportistas de todas las partes del mundo".
También indicó que "en las actuales circunstancias sería impensable" que los comités olímpicos ruso y bielorruso fueran invitados a participar en los Juegos, pero "otra cosa" sería que se admitiese a los atletas "nacidos en Rusia y Bielorrusia" para que compitieran bajo bandera olímpica.
El COI mantiene la opinión de que ningún deportista puede ser discriminado en función de su pasaporte y en los últimos meses ha recabado el apoyo a esta postura de todo tipo de organismo internacionales, desde Naciones Unidas al G-20.
Pero otro miembro del COI, el chileno Neven Ilic, expresó asimismo a EFE sus dudas sobre la manera en la que rusos y bielorrusos podrían acceder a los Juegos de París en ciertos deportes. La vía de los Juegos Asiáticos tuvo que descartarse por su complejidad.
El COI tiene en el seno de su Sesión a dos miembros rusos (Shamil Tarpishchev y Yelena Isinbáyeva) y dos ucranianos (Valery Borzov y Sergey Bubka).
El presidente del organismo, el alemán Thomas Bach, ha tenido hasta ahora al respaldo casi unánime de su asamblea a favor de unos Juegos Olímpicos universales, que no reflejen los conflictos externos, pese a las voces contrarias a la participación rusa procedentes sobre todo de Europa occidental.
Otras injerencias que el COI no está dispuesto a tolerar son las judiciales o políticas que intentan lastrar la independencia del deporte.
Por esa razón está suspendido el Comité Olímpico de Guatemala (COG), cuyo estatus será revisado en las reuniones de Bombay.
La Corte de Constitucionalidad, máximo tribunal del país centroamericano, revirtió hace una semana uno de los fallos que llevó al COI a suspender al COG. Aunque la decisión de los magistrados devuelve los estatutos del organismo a su planteamiento original, está por ver si esto se considera suficiente para levantar la sanción.
Un asunto que se cerrará en Bombay es el programa deportivo de los Juegos de Los Ángeles 2028.
Solo tres días antes de las reuniones del COI, el comité organizador de esa edición propuso incorporar cinco nuevos deportes: béisbol/sóftbol, críquet, squash, fútbol bandera (fútbol americano en su modalidad sin placajes) y lacrosse.
La propuesta, que tiene que ser analizada y, en su caso, validada por la Sesión del COI, deja fuera otras disciplinas como el kárate, el kickboxing o el breaking.
Si la Ejecutiva del COI acepta la sugerencia y la somete a votación de la asamblea, es probable que se vote en bloque, como se ha hecho en ocasiones anteriores.
También se revisará la situación de la halterofilia y del boxeo, por irregularidades en sus federaciones, y del pentatlón moderno, por la revisión de su programa de competición.
Será asimismo el momento de revisar las candidaturas a futuros Juegos Olímpicos, aunque la decisión sobre los de invierno de 2030 se tomará en 2024 en París tras la marcha atrás de varios proyectos, entre ellos el del Pirineo español.
Aunque es difícil que trasciendan al exterior, lo normal sería que en Bombay se produjesen los primeros movimientos de cara a las elecciones presidenciales de 2025, año en el que termina el mandato de Thomas Bach, ya sin posibilidad de reelección.
Debido a la pandemia, los miembros del COI no han tenido una reunión plenamente presencial con el resto de miembros de la 'familia olímpica' desde principios de 2020.
La conclusión de los Juegos de París será probablemente la línea de salida de la carrera electoral.
Lo que sí se decidirá en esta ocasión es la admisión de ocho nuevos miembros, entre ellos la exvoleibolista peruana Cecilia Tait.
'La Zurda de Oro', subcampeona olímpica y mundial, forma parte de una lista que completan la israelí Yael Arad (subcampeona de judo en Barcelona'92 y presidenta del Comité Olímpico de su país), el húngaro Balàzs Fürjes (especialista en grandes instalaciones deportivas), la actriz malaya Michelle Yeoh (embajadora de Naciones Unidas), el alemán Michael Kersten (dirigente y organizador de competiciones deportivas), la sueca Petra Sörling (presidenta de la Federación Internacional de Tenis de Mesa), el surcoreano Jae Youl Kim (presidente de la Federación Internacional de Patinaje) y el tunecino Mehrez Boussayene (presidente del comité de su país).
Los tres últimos serán miembros del COI solo mientras mantengan sus cargos en la federación o el comité correspondientes.
Natalia Arriaga