Bakú, 21 sep (EFE).- Las delegaciones de los representantes del Estado azerbaiyano y de los armenios de Nagorno Karabaj terminaron hoy en la ciudad azerbaiyana de Yevlaj una reunión sobre la reintegración del territorio separatista en Azerbaiyán tras el alto el fuego alcanzado la víspera, informó la agencia oficial Azertac.
Las negociaciones, de las que no han trascendido aún detalles y que acabaron sin que ninguna de las delegaciones hiciera declaraciones a los medios, duraron unas dos horas.
La parte azerbaiyana la encabezó el diputado Ramín Mamédov, designado en marzo responsable de "los contactos con los habitantes armenios de la región de Karabaj", así como por Bashir Hajiyev, el representante especial adjunto del presidente azerbaiyano en los "territorios liberados de la ocupación".
En nombre de los armenios de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj las conversaciones las lideró el diputado David Melkumián y el jefe del grupo del Partido Democrático, Serguéi Martirosián, subjefe del Consejo de Seguridad karabají.
También participó en la reunión un representante del contingente de paz de Rusia desplegado en Nagorno Karabaj desde el fin de la guerra de 44 días en otoño de 2020 entre armenios y azerbaiyanos por el control de esta región.
Los representantes de los armenios llegaron por carretera a Yevlaj -que se encuentra a unos 100 kilómetros al norte de la capital karabají, Jankendi (Stepanakert para los armenios) y a menos de 300 de Bakú- en tres vehículos acompañados por coches de la policía azerbaiyana y uno de las fuerzas de paz rusas.
Las conversaciones forman parte del acuerdo de cese de las hostilidades alcanzado la víspera entre ambas partes para poner fin a una operación militar que Azerbaiyán había iniciado 24 horas antes para restaurar la "soberanía" sobre Nagorno Karabaj.
El bombardeo se produjo tres años después de la última guerra por el control de este territorio, en la que Azerbaiyán recuperó un tercio de Nagorno Karabaj, y tras más de nueve meses de bloqueo del enclave azerbaiyano habitado por 120.000 armenios.
Las autoridades de la autoproclamada república capitularon el miércoles ante Bakú y aceptaron el desarme y la disolución completa de sus tropas.
Azerbaiyán aceptó a su vez mantener conversaciones con el liderazgo karabají sobre el futuro de los armenios que viven en el Karabaj en el marco de la Constitución y las leyes azerbaiyanas.
El presidente azerí, Ilham Alíev, que había exigido a los karabajíes que aceptaran la ciudadanía azerbaiyana para seguir viviendo en dicha región, una línea roja para muchos armenios, prometió la víspera que garantizará los derechos de los armenios que viven en el Karabaj.
El miércoles miles de residentes karabajíes se concentraron en las instalaciones de los pacificadores rusos en el aeródromo de Stepanakert con la esperanza de abandonar la región con destino a Armenia. El aeropuerto no opera vuelos desde la década de la década de 1990.
En el bombardeo azerbaiyano fallecieron al menos 200 personas del lado karabají, incluido 10 civiles, mientras que en el bando azerbaiyano Bakú únicamente ha informado de dos civiles muertos.
Más de 10.000 ciudadanos fueron evacuados de 16 localidades karabajíes.
Tiflis, 21 sep (EFE).- Las fuerzas de Nagorno Karabaj acusaron este jueves a Azerbaiyán de violar el alto el fuego declarado la víspera para poner fin a la operación militar contra ese territorio azerbaiyano poblado por armenios.
"Las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán utilizan diversas armas de fuego en las zonas vecinas a Stepanakert (la capital karabají), violando el acuerdo sobre el alto el fuego", según un comunicado del Ministerio de Defensa de la autoprocalamada república.
"También se escuchan disparos en el centro de la capital", agregó.
Esta información llega mientras las delegaciones de los representantes del Estado azerbaiyano y de los armenios de Nagorno Karabaj se encuentran reunidos en la ciudad azerbaiyana de Yevlaj para abordar la integración del territorio separatista en Azerbaiyán.
Las conversaciones forman parte del acuerdo del alto el fuego alcanzado la víspera entre ambas partes para poner fin a una operación militar que Azerbaiyán había iniciado 24 horas antes para restaurar la "soberanía" sobre Nagorno Karabaj.
El bombardeo se produjo tres años después de la última guerra por el control de este territorio, en la que Azerbaiyán recuperó un tercio de Nagorno Karabaj, y tras más de nueve meses de bloqueo del enclave azerbaiyano habitado por 120.000 armenios.
Las autoridades de la autoproclamada república capitularon el miércoles ante Bakú, al aceptar el desarme y la disolución completa de sus tropas.
Azerbaiyán aceptó mantener conversaciones con el liderazgo karabají sobre el futuro bajo la Constitución y las leyes azerbaiyanas de los armenios que residen en Nagorno Karabaj.
Tiflis, 21 sep (EFE).- La misión de observadores civiles de la UE en Armenia (EUMA) reforzó hoy el patrullaje en la frontera entre este país y el vecino Azerbaiyán, en el contexto de la reciente escalada en el enclave armenio de Nagorno Karabaj, ubicado en territorio azerbaiyano.
"La misión de observadores de la Unión Europea reforzó el patrullaje de la frontera armenio-azerbaiyana y la línea de confrontación, así como en las cercanías de la localidad (fronteriza) de Sotk, para reportar cualquier acción militar o problema de seguridad en el terreno", informó EUMA en X (antes Twitter).
Los observadores reiteraron su compromiso con el mandato encomendado y su disposición a contribuir a estabilizar la situación en esta zona.
Dos semanas atrás, la misión ya había incrementado sus actividades de patrullaje en dos regiones fronterizas entre Armenia y Azerbaiyán en el este y sur del país debido al aumento de las tensiones en la región y las denuncias de Ereván sobre preparativos militares de Bakú.
El pasado martes Azerbaiyán anunció el inicio de una operación antiterrorista en Nagorno Karabaj, tres años después de la última guerra por el control de este territorio, y tras más de nueve meses de bloqueo del enclave armenio.
Las autoridades de la autoproclamada república capitularon el miércoles ante Bakú, al aceptar el desarme y la disolución completa de sus tropas.
Azerbaiyán aceptó mantener conversaciones con el liderazgo karabají sobre el futuro bajo la Constitución y las leyes azerbaiyanas de los armenios que residen en Nagorno Karabaj.