Santiago de Chile, 21 sep (EFE).- La Policía chilena desarticuló la madrugada de este jueves la cúpula de la organización radical indígena Resistencia Mapuche Lafkenche, que cometía constantes sabotajes contra grandes forestales en el sur del país, y detuvo a al menos 10 personas.
Durante el operativo de la Policía de Investigaciones (PDI) se allanaron una decena de viviendas en las comunas de Curanilahue y Cañete, ambas en la región de Biobío, más de 520 kilómetros al sur de Santiago.
"La detención de integrantes de la Resistencia Mapuche Lafkenche es un gran logro, fruto del trabajo conjunto entre Fiscalía y policías que como gobierno estamos impulsando y respaldando con recursos y coordinaciones. En esa línea seguiremos trabajando", dijo en la red social X (antigua Twitter) la ministra del Interior, Carolina Tohá.
Entre los detenidos hay un agente activo y otro ya retirado del cuerpo policial de Carabineros, según información preliminar.
"Esta es una investigación que tiene un par de años, inicia en 2021, y que se vincula a la sustracción de madera", explicó en la radio ADN Ignacio Castillo Val, director de la Unidad Especializada de Crimen Organizado de la Fiscalía Nacional.
En el Bíobio y otras zonas del sur de Chile, como La Araucanía, existe desde hace décadas una disputa territorial entre el Estado, algunas comunidades radicales mapuche y empresas forestales que explotan tierras consideradas ancestrales por los indígenas.
El pueblo mapuche, la etnia indígena más numerosa de Chile, reclama los territorios que habitaron durante siglos, antes de que fueran ocupadas a la fuerza por el Estado chileno a fines del siglo XIX en un proceso conocido oficialmente como la "Pacificación de La Araucanía" y que ahora pertenecen en su mayoría a empresas forestales.
En ese contexto se producen con frecuencia ataques incendiarios a maquinaria y predios, cortes de ruta y robo de madera, además de tiroteos con víctimas mortales.
Desde mediados de 2022, en la zona rige un estado de excepción constitucional ratificado por el Congreso, que permite el despliegue militar en la zona para que ayuden a Carabineros a controlar el orden público, incluyendo vigilancia en las principales carreteras y caminos aledaños.