(Bloomberg) -- Las autoridades estadounidenses dieron a conocer su respuesta más reciente a la crisis bancaria de este año con propuestas para aumentar la supervisión de los prestamistas medianos y exigirles que se preparen mejor para posibles quiebras.
Los planes de la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés) no son una señal de nuevas tensiones en el sector, sino más bien un intento de garantizar que los bancos puedan disolverse de forma fácil y rápida después de cualquier colapso.
El regulador propuso el martes que se exija a los bancos con tan sólo US$100.000 millones en activos emitir suficiente deuda a largo plazo para cubrir pérdidas de capital en tiempos de tensiones graves. Los prestamistas también tendrían que fortalecer sus planes hipotéticos de resolución para que pudieran disolverse fácilmente si fuera necesario.
Los mandatos de deuda a largo plazo se implementarían gradualmente a lo largo de tres años. Pero hubo algo de alivio: el nuevo plan no daría lugar a requisitos de capacidad total de absorción de pérdidas, conocidos como TLAC, para los bancos grandes que no sean ni los de mayor tamaño ni los más complejos.
El proyecto de reglas parece “menos oneroso” de lo previsto para los bancos afectados, como US Bancorp y PNC Bank, escribieron los analistas de Bloomberg Intelligence Herman Chan y Sergio Ferreira.
Las abruptas quiebras de Silicon Valley Bank y Signature Bank en marzo destacaron los obstáculos en la supervisión de los bancos medianos. Los planes asemejarían la supervisión al escrutinio de los mayores prestamistas de Wall Street.
Desde marzo, los reguladores han propuesto un conjunto de planes para aumentar el escrutinio. La cuestión de quién debería asumir los costos de las quiebras bancarias se ha vuelto particularmente polémica.
La decisión de las autoridades estadounidenses de declarar una “excepción de riesgo sistémico” y cubrir todos los depósitos en SVB y Signature le costó al Fondo de Seguro de Depósitos del Gobierno miles de millones de dólares. El fondo normalmente se utiliza para cubrir hasta US$250.000 por cuenta, pero la decisión de respaldar los depósitos no asegurados significa que los grandes bancos ahora tendrán que devolver gran parte de esa cantidad en nuevas comisiones.
Un colchón de deuda a largo plazo como el propuesto el martes ayudaría a proteger el fondo al evitar la necesidad de una excepción de riesgo sistémico, dijo este mes el presidente de la FDIC, Martin Gruenberg.
Traducido por Paulina Steffens.
Nota Original:US Unveils Plan to Hit More Banks With Debt Requirements (1)
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