Lima, 23 ago (EFE).- El capital chino levanta un megapuerto en la ciudad peruana de Chancay, que entrará en operaciones a fines de 2024, con la expectativa de ser un "hub" (centro logístico) regional y acelerar la distribución del comercio entre Asia y Suramérica.
En el céntrico distrito de Chancay, 78 kilómetros al norte de Lima, la empresa china Cosco Shipping construye "el primer puerto privado para uso público" que, debido a su profundidad de más de 16 metros, podrá recibir a buques con capacidad de 18.000 contenedores.
Actualmente, todos estos buques "no pueden entrar a plena carga a ningún puerto de Sudamérica", señaló el gerente de Asuntos Corporativos de Cosco Shipping, Mario de las Casas, durante una visita en las obras del nuevo terminal marítimo.
Esas enormes naves "van a poder reducir su tiempo de travesía principalmente en 10 días", indicó el ejecutivo, lo cual es muy importante para cargas perecederas como las de agroexportación.
En Cosco, que maneja una flota de naves y puertos alrededor del mundo, y el mercado asiático en general "todo se exporta por contenedores", anotó De las Casas.
"Lo único que no está considerado en producto de exportación (en Chancay) es minerales a granel porque la permisiología (trámites) iba a ser demasiado larga y actualmente existe en (el vecino puerto de) el Callao una faja transportadora y toda una infraestructura para eso", explicó.
El portavoz de Cosco declaró que la construcción del puerto en Chancay "es parte de la ruta de la seda" del gigante asiático, dado que "China hace años viene invirtiendo en infraestructura y logística en todo el mundo, en puertos en Grecia, en España, en África", por lo que "es parte de su plan mundial".
En el caso del nuevo terminal peruano, países vecinos como Brasil han mostrado interés en poder usar esta ruta para exportar la soya que se produce en Acre, fronteriza con la Amazonía de Perú.
De las Casas dijo que si una parte de la exportación de Brasil sale por Chancay, "ya significa que va a generar una demanda de servicios y trabajo".
"UNA VARIABLE ESTRATÉGICA"
En un reciente foro internacional de puertos realizado en Lima, el gerente general adjunto de Cosco Shipping, Gonzalo Ríos, declaró a EFE que, "más allá de ser solamente el puerto, es una variable estratégica en las cadenas de distribución regionales".
"El crecimiento que proyecta el sector agrícola en el Perú, todos los grandes proyectos de irrigación significan casi duplicar la frontera agrícola del Perú y eso significa un enorme crecimiento del mercado que requiere de un puerto concentrador para llegar a los consumidores que están en Asia, particularmente", expresó Ríos.
El gerente remarcó que "el mercado asiático para ese tipo de productos (agrícolas) todavía es algo que está por crecer muchísimo" y que en Perú "hacer 'clusters' (grupos) logísticos en cada una de sus regiones es el camino hacia el desarrollo".
"Chancay entra a ser un jugador con mucha modernidad, con mucha eficiencia, con volúmenes importantes de movimiento que, junto con los puertos del Callao, va a significar que el Perú sea un 'hub' regional líder en esta componente logística", manifestó.
En opinión del presidente de la Comisión de Asuntos Marítimos, Portuarios y Aduaneros de la Cámara de Comercio de Lima, Alberto Ego-Aguirre, al ser Perú un país pequeño, el "éxito tiene que ser exportar, para que el Perú siga creciendo".
"Los puertos mueven el 85 % de los productos, la vía aérea siempre será más cara", anotó en declaraciones para EFE.
Para el representante gremial, el crecimiento económico de su país "tiene que ir de la mano con el crecimiento de los puertos", y conexo a los puertos, "mejores carreteras".
Mónica Martínez
Lima, 22 ago (EFE).- El megapuerto de Chancay que la empresa Qosco Shipping construye 80 kilómetros al norte de Lima se ha convertido en el símbolo de la inversión china en Perú, pero, más allá de esta gran obra de infraestructura, las empresas del país asiático han expandido sus inversiones en la nación andina a sectores tan diversos como minería, energía y tecnología.
Según el último reporte del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), China fue el primer destino de las exportaciones peruanas en los primeros cuatro meses de 2023.
En total, China recibió exportaciones peruanas por un valor de 7.529 millones de dólares, lo que supone el 34 % del total.
La cifra supone un 6,6 % más a la registrada en el primer cuatrimestre de 2022. Ese empuje estuvo motivado en buena medida por el incremento de productos pesqueros como la pota (887 %) y minerales como el zinc (25,5 %), plomo (8 %) y cobre (7 %).
Es una muestra de lo que puede suceder una vez esté concluido el puerto de Chancay, que cuenta con una inversión superior a los 3.000 millones de dólares y que, aunque no es la primera inversión portuaria de China en Latinoamérica, sí será la primera que operen de forma directa.
Esta infraestructura hará de Perú el principal punto de ingreso de productos de Asia y convertirá al país en un gran "hub" para toda la región.
Forma parte del gran proyecto de la Nueva Ruta de la Seda y acerca a Perú a su vecino transpacífico, lo que expone la importancia no solo económica, sino también geopolítica del puerto.
El puerto de Chancay está en la costa central de Perú y de Suramérica, un lugar estratégico por su ubicación geográfica y conectividad, por las excepcionales características naturales de la bahía y por la disponibilidad de terreno suficiente para permitir el desarrollo armónico de un gran complejo portuario y logístico integrado.
INVERSIONES MINERAS
Las compañías chinas han invertido más de 16.000 millones de dólares en la industria minera peruana desde 2009, un sector que supone el 10 % del PIB peruano.
La mayor inversión está centrada en Las Bambas, una mina de cobre ubicada en el sureño departamento de Apurímac que aporta el 1 % al PIB peruano.
La mina estuvo paralizada por conflictos que limitaron su producción durante 2022. La mina fue adquirida en 2014 por parte de MMG (controlada por la estatal China Minmetals Corporation) a la suiza Glencore a cambio de 7.000 millones de dólares.
Por su parte, la Minera Chinalco Perú, controlada por Aluminum Corporation of China, opera Toromocho, en la región Junín, que produjo 244.712 toneladas de cobre en 2022.
Ha sido una de las empresas con mejor desempeño en lo que va de 2023 y los dueños están invirtiendo 1.355 millones de dólares para extender su capacidad de procesamiento.
Las empresas chinas son, además, las únicas que están explotando hierro en Perú. Shougang Hierro, filial del grupo Shougang Co., opera la mina Marcona, principal yacimiento peruano de este mineral de hierro.
EL SALTO A LA ENERGÍA
El desembarco de las inversiones china saltó en 2019 a Luz del Sur, una empresa de distribución de electricidad que atienda a cerca del 30 % del mercado en Perú.
La empresa China Yangtze Power International, subsidiaria de la estatal Three Gorges Corporation, invirtió 3,590 millones de dólares y completó la compra en 2020.
Esta transacción supuso en ese momento la mayor adquisición de activos de distribución de energía en el extranjero por parte de una empresa china.
Previamente, Three Gorges Corporation había comprado Chaglla, la tercera central más grande del país, por unos 1.400 millones de dólares a Odebrecht.
La presencia china en este sector, se consolidó con la adquisición de Enel Perú por parte de la estatal China Southern Power Grid International (CSGI) a cambio de 2.900 millones de dólares, una operación todavía en proceso.
De acuerdo a la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), eso supone una "concentración del 100 % del mercado de distribución eléctrica de Lima en manos de la República Popular China".
Gonzalo Domínguez Loeda