Sao Paulo, 21 ago (EFE).- Un hacker que confesó el pasado jueves que el expresidente brasileño Jair Bolsonaro (2019-2022) le pidió invadir las urnas de votación del sistema electoral fue condenado este lunes a veinte años de prisión por otro delito informático.
La Justicia Federal condenó a Walter Delgatti y a otras seis personas en el marco de la Operación Spoofing, realizada por la Policía Federal en 2019, según informó el servicio estatal de noticias Agencia Brasil.
La decisión del juez Ricardo Leiten es ajena al caso que implica a Bolsonaro y se refiere a una actuación de Delgatti que puso en entredicho la imparcialidad de la Justicia brasileña en el marco de la Lava Jato, la mayor operación anticorrupción de la historia del país.
Para el juez del Décimo Juzgado Federal en Brasilia, Delgatti y sus cómplices intentaron vender la información obtenida de manera ilegal a medios de comunicación por 200.000 reales (unos 40.000 dólares), de acuerdo con la Agencia Brasil.
"Sólo después de la resistencia de los periodistas a pagar por esa información hubo una desistencia de Walter para obtener una remuneración por entregar el material", apuntó el juez, que rechazó el argumento de que el hacker actuó para "combatir injusticias".
Además de obtener las conversaciones en la red de mensajería Telegram, Delgatti consiguió también los datos bancarios de varias víctimas y los puso a la venta en grupos clandestinos de redes sociales, de acuerdo con las pruebas consideradas por el juez.
Una de las víctimas fue el actual senador y entonces ministro de Justicia, Sérgio Moro, quien se vio salpicado por esa filtración de conversaciones que mantuvo con un grupo de fiscales cuando era juez y que pusieron en duda su imparcialidad en la Lava Jato.
La actuación de Moro y los fiscales en la Lava Jato condujo a la cárcel a diversos empresarios y políticos, entre ellos al expresidente y actual mandatario, Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010).
El medio The Intercept Brasil, liderado por el periodista estadounidense Glenn Greenwald, publicó en la época, en asociación con algunos de los principales diarios del país, una serie de diálogos entre Moro y los fiscales.
Las filtraciones llevaron a que Moro prestara declaraciones ante la Cámara de Diputados y el Senado y sirvieron para anular varias de las condenas, entre ellas las de Lula, que estuvo detenido por 580 días y recuperó sus derechos políticos para tornarse presidente.
Delgatti, que respondía al proceso en libertad condicional, fue detenido a comienzos de agosto por otra denuncia, la de invasión a los servidores del Consejo Nacional de Justicia, a pedido de la disputada bolsonarista y de ultraderecha Carla Zambelli.
El experto en informática dijo el jueves ante una comisión parlamentaria que investiga la asonada del pasado 8 de enero a las sedes de los tres poderes por bolsonaristas radicales, que el exmandatario incluso le prometió "un indulto" en caso de que fuese descubierto.
Según declaró, Bolsonaro y algunos de sus asesores le sugirieron crear una urna electrónica falsa, que sería usada en una propaganda de campaña como "prueba" de que el sistema era fraudulento, como sostiene sin pruebas Bolsonaro.