Copenhague, 17 ago (EFE).- Las autoridades suecas elevaron este jueves el nivel de amenaza terrorista al segundo más alto por varios factores, entre los que figuran las protestas de varios países musulmanes por las recientes quemas del Corán en este país escandinavo.
La amenaza, por primera vez en siete años, pasa del tercer al cuarto nivel en una escala de cinco, lo que supone que ahora es "alta", aunque los servicios de inteligencia (Säpo) rechazaron que existan sospechas concretas y hablaron de un análisis conjunto.
"Nos encontramos con que ha empeorado la situación respecto a la amenaza de atentado contra Suecia y que esta amenaza va a persistir durante un largo tiempo", dijo en rueda de presa la jefa del Säpo, Charlotte von Essen.
La decisión no se basa en un hecho "único", resaltó Von Essen, sino en una estimación "estratégica y a largo plazo", en la que Suecia ha pasado de ser un objetivo "legítimo" a "prioritario".
"En nuestra estimación para 2023 constatamos que las ofensas hacia el Islam pueden influir en la amenaza terrorista", señaló en la misma comparecencia la jefa del Centro de Análisis de la Amenaza Terrorista, Ahn-Za Hagström.
El Säpo aludió también al empeoramiento de la seguridad por la guerra en Ucrania y a la amenaza de grupos de ultraderecha.
Las quemas del Corán ocurridas en Suecia han provocado grandes manifestaciones en Yemen o Irak, donde además se prendió fuego a la embajada sueca, mientras que varios gobiernos de países de mayoría musulmana han avisado de que permitir esos actos puede tener consecuencias en las relaciones diplomáticas.
Las autoridades suecas confirmaron también la semana pasada un intento fallido de atentado contra su embajada en Líbano, al lanzar un desconocido un objeto similar a un cóctel molotov contra la entrada de la legación, aunque nadie resultó herido.
Tanto el Gobierno de Suecia como el de Dinamarca, donde también ha habido quemas del libro sagrado de los musulmanes, anunciaron hace semanas que estudian la posibilidad de restringir esos actos o prohibir los que se convoquen ante embajadas extranjeras, una propuesta que ha recibido críticas de la oposición política en ambos países.
Dinamarca y Suecia han reforzado este mes los controles fronterizos por lo que consideran un aumento de la amenaza terrorista.