Tegucigalpa, 18 jul (EFE).- La coordinadora residente de las Naciones Unidas en Honduras, Alice Shackelford, y la titular del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos en el país (Conadeh), Blanca Izaguirre, abogaron este martes por la búsqueda de cuatro defensores del territorio garífuna secuestrados hace 3 años.
"Hace 3 años inicié mi posición en Honduras y me recuerdo muy bien de la desaparición de los compañeros garífuna", indicó Shackelford en un mensaje en Twitter.
La coordinadora de la ONU, residente en Tegucigalpa, se unió "al llamado de búsqueda, acceso a la justicia y compromiso en la paz y respeto de los derechos humanos".
Los secuestrados son Milton Joel Martínez Álvarez, Suami Aparicio Mejía García, Gerardo Misael Trochez Calix y Albert Snaider Centeno Thomas.
Los cuatro defensores del territorio ancestral garífuna fueron secuestrados la madrugada del 18 de julio de 2020 en la comunidad Triunfo de la Cruz, en el Caribe hondureño, por hombres armados que vestían chalecos con el logo de la Dirección Policial de Investigación (DPI).
Organismos de derechos humanos y pobladores de comunidades garífunas en la costa caribeña de Honduras asocian la desaparición de los cuatro jóvenes a los reclamos de tierra y otros derechos de la etnia negra del país centroamericano.
La comisionada de Derechos Humanos exhortó al Estado de Honduras a "ofrecer resultados serios, concluyentes y efectivos de las investigaciones" sobre la desaparición forzada de los cuatro garífunas.
"Los familiares tienen el derecho de conocer la verdad de los hechos y es obligación del Estado realizar una investigación para su esclarecimiento, procesar a los responsables y adoptar las medidas necesarias de no repetición", subrayó Izaguirre.
Según Miriam Miranda, líder de la Organización Fraternal Negra de Honduras (Ofraneh), en los últimos 3 años la comunidad garífuna ha sufrido un "incremento de la inseguridad y violencia".
Miranda señaló que la comunidad negra exige la instalación de una comisión de cumplimiento de las sentencias emitidas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) a favor de los territorios garífunas.