Ciudad de México, 17 jul (EFE).- El tenor mexicano Javier Camarena presenta su nuevo disco “La voz de México”, en el que hace un recorrido por diversos géneros de la música popular de su país, la cual, consideró en una entrevista con EFE, tiene “mucho sol”.
“La música mexicana tiene mucho sol, alegría de vivir. Uno lo puede decir, pero cuando lo vives es cuando puedes dar testimonio de ello, de estar en un concierto en Zagreb (capital de Croacia), en España, en Suiza o en Estados Unidos siempre viene la sonrisa en el público”, relató el cantante.
“La voz de México” es un proyecto que tenía en mente desde hace mucho tiempo y, aunque la idea inicial era realizar un proyecto sinfónico, desde Sony Music México le ofrecieron realizar un concepto “que apostara por la voz educada de tenor al servicio de la música mexicana”.
Por lo tanto, decidieron conjuntamente hacer esta muestra de la cultura del país latinoamericano con arreglos muy variados: desde son jarocho y huapango hasta música ranchera y mariachi, pasando por bolero, entre otros.
El disco, que cuenta también con un DVD con la producción en vídeo, contiene temas icónicos como “Sabor a mí”, “Hasta que te conocí” o “La media vuelta”, y colaboraciones con artistas como Yuri, Eugenia León o Lila Downs.
“Lograr esta colección un poco más amable para el público, conforme lo íbamos platicando más, se me iba antojando más aún”, compartió el cantante, quien indicó que este proyecto es un regalo de su parte para todos los mexicanos y busca eliminar estigmas.
TERMINAR CON LOS ESTIGMAS
Sobre esto, compartió que opina que un cantante de ópera se entrena para hacer de su voz un instrumento, por lo que sería necesario que pudiese utilizarla en toda su gama.
“Lo que esperaría es que se deje de estigmatizar al cantante de ópera por parte del público y que el cantante de ópera también sepa que pueda utilizar toda la paleta de colores de su voz”, dijo.
Relató que ante la salida de este disco muchas personas le preguntaron en redes sociales si ya no va a dedicarse a la ópera, pero explicó que son dos cosas totalmente diferentes y que ambas las ama.
Además, en los últimos tiempos, debido a que lleva 20 años de carrera, le ha tocado poner en la balanza el trabajo y el placer.
En este sentido, ha decidido que, además de cumplir con el trabajo que le apasiona y está disfrutando de un “interesante” proceso de adaptarse a los cambios en su voz y en su repertorio, también quiere dar espacio a este tipo de proyectos.
“Son mucho más de corazón. Si bien la ópera es un género que amo profundamente, no deja de ser mi trabajo, y esto (el disco) es algo que nace de mi alma mexicana, de mi corazón jarocho (originario de Veracruz) y de mi amor por mi país”, terminó.
Por el momento no hay conciertos programados especiales en torno al disco -aunque suele incluir algunas de las canciones en sus recitales-, pero espera pronto poder acomodar su agenda para cantar todas las canciones del proyecto en directo.