Polonia exige a Ucrania exhumaciones para investigar una masacre de la II Guerra Mundial

Cracovia (Polonia), 4 jul. El viceministro polaco de Interior, Maciej Wasik, insistió este martes en la necesidad de que Ucrania acepte "exhumaciones y juicios" relacionados con un episodio de la II Guerra Mundial, tema que calificó de "espina en las relaciones bilaterales entre ambos países.

En una entrevista radiofónica, Wasik se refirió a la próxima conmemoración, el 11 de julio, del 80 aniversario de la conocida como "masacre de Volhynia", una acción de los insurgentes nacionalistas ucranianos (UPA) que costó la vida a decenas de miles de civiles de etnia polaca, y aseguró que Polonia "será firme en este asunto" y exigirá "exhumaciones, juicios apropiados" y "serias correcciones de errores históricos" a Kiev.

El 20 de junio, el viceministro de Exteriores polaco Pawel Jablonski afirmó que "resulta difícil de imaginar que Ucrania se una a la Unión Europea (UE) sin permitir antes exhumaciones" en los lugares donde tuvo lugar la masacre.

Las declaraciones del diplomático polaco fueron precedidas por la exigencia, formulada unos días antes, del responsable del Instituto de Memoria Histórica ucraniano, Anton Drobovych, en las que éste achacaba a los polacos no hacer nada por mantener y restaurar los monumentos en memoria de los combatientes ucranianos de la II Guerra Mundial.

En aquella ocasión, el Gobierno polaco calificó de "muy poco inteligentes, muy poco apropiadas y dañinas para las relaciones polaco-ucranianas" esas palabras, lo que reavivó el contencioso histórico que Ucrania y Polonia mantienen en este tema.

En una visita oficial a Polonia el 24 de mayo, el presidente del Parlamento de Ucrania, Ruslan Stefanchuk, pronunció un discurso en el Congreso de los Diputados polaco en el que dijo que "los ucranianos comprenden el dolor y expresan su simpatía a las familias y descendientes de las víctimas" de Volhynia e hizo un llamamiento para "aceptar la verdad" y superar "esa extremadamente difícil pero necesaria prueba".

La figura de Stepan Bandera, ligado al episodio de Volhynia y considerado héroe nacional en Ucrania y criminal de guerra en Polonia por liderar los ataques contra personas de etnia polaca en la II Guerra Mundial, ya ocasionó fricciones entre Varsovia y Kiev cuando, en enero de este año, el parlamento de Ucrania le rindió un homenaje.

Al día siguiente del hecho, el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki aseguró haber comunicado su "valoración negativa" a su homólogo ucraniano, Denys Shmyhal, "así como a todos los que no lo entienden y ensalzan a Bandera" y "el genocidio de entre 100.000 y 200.000 polacos" del que, dijo Morawiecki, algunos miembros de su familia aún tienen "terribles recuerdos".

Además, el jefe del Gobierno polaco recordó que en noviembre de 2022 Kiev dio permiso para reiniciar la exhumación de cuerpos en fosas comunes en algunos puntos del oeste de Ucrania y dijo que "aún estamos esperando que se materialice este acuerdo". EFE

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