Lima, 12 jun. El Ministerio de Interior de Perú informó este lunes que ha erradicado 6.008 hectáreas de cultivos ilegales en zonas cocaleras del país en lo que va de 2023, lo que evita que estas plantaciones sean utilizadas en la producción de cocaína.
A través de un comunicado, el ministerio detalló que estas acciones fueron llevadas a cabo por el Proyecto Especial de Control y Reducción de Cultivos Ilegales en el Alto Huallaga (Corah), con apoyo de la Policía Nacional del Perú (PNP).
De acuerdo información del Corah, la erradicación comprendió un total de 3.311 parcelas, pertenecientes a las provincias de coronel Portillo (Ucayali), Puerto Inca (Huánuco), Constitución (Oxapampa) y Tocache (San Martín), donde también se eliminaron 28 metros cuadrados de almácigos.
El reporte indicó que Ucayali, en el centro del país, es la región que presenta la mayor cantidad de hectáreas de hoja de coca erradicadas a la fecha, con un total de 3.730 seguida de San Martín, con 890 hectáreas y de Pasco, con 784.
Según estimó el ministerio, esta destrucción de cultivos evitaron la producción potencial de 56,12 toneladas métricas de clorhidrato de cocaína.
El total de hoja de coca erradicada a la fecha representa un avance del 30 % en la meta de 20.000 hectáreas proyectada para este año, e incluye comunidades nativas, zonas de resiembra, concesiones forestales, bosques y zonas de amortiguamiento del país.
Hace poco más de un mes varios líderes indígenas de Perú aseguraron que el avance del narcotráfico y la ausencia del Estado en sus territorios fuerza a sus comunidades a protegerse de las amenazas de esta actividad ilícita y lamentaron que el Gobierno no responda a su petición de dotar de armas a sus comités de autodefensa.
"Se ha solicitado al Gobierno y al Ministerio de Defensa para que doten de armamento a los comités de autodefensa (...) Lo hemos hecho reiteradas veces, (pero han hecho) caso omiso", dijo en una conferencia Yanet Velasco Castillo, tesorera del Consejo Directivo de la Central Asháninka del Río Ene (CARE).
Esta organización agrupa a 19 comunidades nativas y 33 anexos ubicados en el distrito Río Tambo, dentro de la provincia de Satipo, de la selvática región de Junín, una zona perteneciente al Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), la mayor cuenca cocalera de Perú, considerado el segundo productor mundial de cocaína, sólo por detrás de Colombia. EFE
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