Madrid, 18 may. El secretario general iberoamericano, Andrés Allamand, señaló este jueves que la cumbre de julio próximo en Bruselas entre mandatarios de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) se presenta como un "punto de partida para una nueva relación" en múltiples aspectos.
Entre ellos, apuntó, el diálogo político, los acuerdos comerciales, las inversiones, la cooperación, la relación de todo lo que supone la revolución digital, la seguridad y las migraciones, informó la Secretaría General Iberoamericana (Segib) en su web.
Allamand intervino en la presentación de un informe de la fundación española de análisis y debate Alternativas, que resalta la “preocupación” a ambos lados del Atlántico sobre la interrupción del diálogo político entre ambas regiones, en “suspenso desde 2015”.
Presentado en la sede de la Segib (Madrid), el documento 'América Latina y Europa: más allá de la cumbre' constata que se han mantenido las acciones de cooperación y las negociaciones comerciales han seguido su curso desde entonces, pero no ha sido posible celebrar un “encuentro de jefes de Estado y de Gobierno”.
La próxima cumbre UE-CELAC llegará auspiciada por la próxima presidencia semestral española de la UE y supone "una gran oportunidad para intensificar la relación política" entre ambas partes y "situar la alianza birregional en el nuevo mapa geopolítico tras la pandemia o la guerra de Ucrania", indicó Alternativas en un comunicado.
La profesora de la Universidad Complutense de Madrid Érika Rodríguez, coordinadora del informe, habló de cómo la seguridad debe figurar en la agenda de futuro de América Latina y Europa. Un tema que debe ser visto, incidió la académica, desde el punto de vista de los fallos de las democracias y de la desigualdad, según la Segib.
José Antonio Sanahuja, director de la Fundación Carolina y coautor del estudio, incidió en que la necesidad de revisar la relación a ambos lados del océano responde a un interés geopolítico y una apuesta por el multilateralismo.
Igualmente, es consecuencia del impulso que debe darse a la cooperación en democracia y en derechos humanos y a un nuevo modelo de desarrollo más sostenible e igualitario.
En una intervención telemática, la embajadora de México en Chile, Alicia Bárcena Ibarra, ahondó en la idea de avanzar en una agenda más progresista con políticas más equitativas y la mirada puesta en lo medioambiental, lo digital y nuevas formas de financiación.
Otra de las autoras, Lorena Ruano, profesora del Centro de Investigación y Docencia Económicas de México, destacó la complementariedad económica recíproca entre América y Europa.
Según el informe de Alternativas, la cumbre UE-CELAC llega en el contexto de una "crisis" de la globalización y del orden internacional que afecta profundamente a las “estructuras sociales y económicas” de las dos regiones.
Y eso hace necesaria una “redefinición de los patrones y estrategias de inserción internacional, de las políticas exteriores y de desarrollo", entre otras conclusiones. EFE
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