NUEVA YORK (AP) — Un jurado declaró el martes a Donald Trump responsable de abusar sexualmente de la columnista E. Jean Carroll en 1996, concediéndole 5 millones de dólares en una sentencia que podría perseguir al expresidente en su campaña para regresar a la Casa Blanca.
El veredicto fue dividido: algunos miembros del jurado rechazaron la aseveración de Carroll de que fue violada, y declararon a Trump responsable de una agresión sexual en grado menor. Sin embargo, el fallo se suma a los problemas legales de Trump y reivindica a Carrol, cuyas acusaciones fueron ridiculizadas y rechazadas por Trump durante años.
Carroll asentía con la cabeza durante la lectura del veredicto en un tribunal federal de la ciudad de Nueva York horas después de que iniciaron las deliberaciones. Luego abrazó a simpatizantes y sonreía entre lágrimas. A medida que la gente se retiraba de la sala de la corte se podía escuchar a Carroll reír y llorar.
Los jurados también declararon a Trump responsable de difamar a Carroll después de que ella hiciera públicas las acusaciones. Trump decidió no asistir al juicio civil y no estuvo presente durante la lectura del veredicto.
Pero arremetió inmediatamente con un comunicado publicado en su sitio de redes sociales, afirmando de nuevo que no conoce a Carroll y refiriéndose al veredicto como “una vergüenza” y “una continuación de la mayor cacería de brujas de todos los tiempos”. El exmandatario prometió apelar el veredicto.
El abogado de Trump, Joseph Tacopina, estrechó la mano de Carroll y abrazó a su abogada, Roberta Kaplan, después del veredicto. Afuera del tribunal, Tacopina dijo a la prensa que la decisión del jurado de fallar a favor de Trump frente a la acusación de violación pero aun así declararlo responsable de agresión sexual, fue “desconcertante” y “extraña”.
“En parte me siento satisfecho de que Donald Trump no fuera catalogado como un violador”, agregó.
Tacopina defendió la ausencia de Trump en el juicio, señalando que hubiera ingresado a “un ambiente de circo, y tenerlo aquí habría sido un circo mayor”.
“¿Qué más puedes decir además de ‘yo no lo hice’? Y eso fue lo que estuvo diciéndolo todo el tiempo”.
En un comunicado emitido después de que saliera del tribunal sonriente pero sin hablar, Carroll dijo que demandó a Trump para “limpiar mi nombre y recuperar mi vida. Hoy, por fin, el mundo conoce la verdad. Esta victoria no es mía solamente, sino de todas las mujeres que han sufrido porque no les creyeron”.
Kaplan dijo en un comunicado que esperaba que el caso de su clienta muestre que nadie está por encima de la ley, “ni siquiera el presidente de Estados Unidos”.
Se desconoce si el veredicto tendrá implicaciones en el tercer intento de Trump por llegar a la presidencia. Trump mantiene ventaja entre los contrincantes republicanos, y ha sufrido pocas consecuencias políticas de controversias previas, que van desde las revelaciones atrevidas en la cinta de “Access Hollywood” hasta su encausamiento penal en Nueva York.
La mayoría de sus rivales guardaban silencio tras el veredicto, indicio de su renuencia a contrariar a los simpatizantes de Trump que son cruciales para ganar la candidatura presidencial republicana. El exgobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, uno de los pocos abiertos detractores de Trump en la contienda, dijo que el veredicto es “otro ejemplo del indefendible comportamiento de Donald Trump”.
Carroll fue una de las más de una docena de mujeres que han acusado a Trump de agresión o acoso sexual. Hizo pública su denuncia en 2019 de que el republicano la violó en el probador de ropa de una tienda departamental de lujo en Manhattan.
Trump, de 76 años, lo negó, diciendo que nunca se encontró con Carroll en la tienda y que no la conocía. La calificó como una "demente” que inventó “una historia fraudulenta y falsa” para vender una autobiografía.
Carroll, de 79 años, había solicitado una indemnización por daños y perjuicios no especificada, además de que se retractara de lo que, según ella, fueron negativas difamatorias por parte de Trump.
En el juicio se volvió a tratar el controversial tema de la conducta de Trump hacia las mujeres.
Carroll ofreció varios días de testimonio franco y en ocasiones emotivo, respaldado por el de dos amigas que dijeron a los miembros del jurado que ella les había informado de la supuesta agresión en los momentos y el día posteriores.
Los miembros del jurado también escucharon a Jessica Leeds, una excorredora de bolsa que testificó que Trump la manoseó contra su voluntad en un avión en la década de 1970, y a Natasha Stoynoff, una escritora que dijo que Trump la besó a la fuerza mientras ella lo entrevistaba para un artículo en 2005.
El jurado, compuesto por seis hombres y tres mujeres, también vio la conocida grabación de “Access Hollywood” de 2005 en la que Trump habla de besar y toquetear a mujeres sin preguntar.
The Associated Press no suele publicar los nombres de personas que afirman haber sufrido agresiones sexuales a menos que las denuncien públicamente, como lo han hecho Carroll, Leeds y Stoynoff.