Argelia evoca un sangriento período del colonialismo francés en el Día de la Memoria

Guardar

Argel, 8 may. Argelia conmemora hoy el Día de la Memoria, que recuerda la mortal represión de 1945 por parte de las fuerzas coloniales francesas a las manifestaciones de argelinos que celebraban la victoria sobre el nazismo en la guerra y aprovecharon para pedir la independencia del país.

El ministro argelino de Muyahidín, Laid Rebigua, presidió hoy la gran marcha celebrada en la ciudad comercial de Sétif, en el sureste de Argel, origen de una ola de violencia que se extendió durante semanas y terminó con la vida de 45.000 argelinos.

Con motivo de esta efeméride, decretada oficial hace tan solo dos años, el presidente, Abdelamdjid Tebboune, defendió la resolución "del archivo de la historia y la memoria", en referencia a las siempre delicadas relaciones diplomáticas con Francia, por "un camino que asegure la total transparencia, integridad y objetividad, lejos de cualquier concesión o regateo".

En 1945, al joven Saal Bouzid, le costó la vida enarbolar en una manifestación una bandera argelina, entonces prohibida, lo que desencadenó un movimiento de protesta y una represión sin precedentes en las ciudades orientales de Sétif, Guelma y Jerrata, hoy símbolos de ese acontecimiento.

La marcha de conmemoración partió hoy desde la plaza en la que murió Saal Bouzid, que lleva su nombre, y durante la jornada las autoridades rindieron homenaje a miles de víctimas de un sangriento periodo en el que decenas de aldeas y pueblos fueron arrasados.

Las masacres de aquellos días son consideradas como el detonante del movimiento nacional contra el colonialismo francés que, tras la guerra (1954-1962), llevaron a Argelia a su independencia.

"Este aniversario recuerda un día más aquellas eternas jornadas patrias en que este glorioso pueblo logró grandes gestas históricas y epopeyas, que quedarán arraigadas en su conciencia para fortalecer aún más nuestro orgullo y consolidar la cohesión nacional", dijo Tebboune sobre esta 78 conmemoración.

El pasado mes de agosto, durante la visita del presidente francés, Emmanuel Macron a la capital argelina, los dos países firmaron la llamada "Declaración de Argel" que incluye la creación de una comisión mixta de historiadores para estudiar las consecuencias de aquella etapa colonial (1830-1962).

"Tenemos buenas esperanzas de lograr, en el corto plazo, avances en este proceso, basado ​​en la importancia de la misión encomendada a la comisión de historiadores para tratar todas las cuestiones, incluidas la restitución de archivos, bienes y restos mortuorios de resistentes, ensayos nucleares y desaparecidos", aseguró Tebounne.

El mes pasado, el presidente argelino aplazó su visita oficial a París, prevista para este 2 y 3 de mayo, en la que ahondarían en el complejo expediente entre los dos países resultante de la "Declaración de Argel" con vistas a refundar sus relaciones bilaterales.

Guardar