MADRID (AP) — Más de 1.500 personas fueron evacuadas el viernes debido a un enorme incendio forestal en la región de Castellón, en el este de España, que representa un inicio anticipado de la temporada de incendios del país en medio de condiciones sumamente secas.
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, prometió apoyo pleno a quienes han tenido que abandonar sus hogares.
Las autoridades locales señalaron que el fuego ha afectado alrededor de 3.000 hectáreas de tierra desde que inició el jueves, lo que obligó a los residentes a refugiarse en albergues operados por la Cruz Roja y otras organizaciones benéficas. De momento se desconoce la causa del incendio.
Ximo Puig, presidente de la región de Valencia que incluye a Castellón, dijo a los reporteros que “hubo un incendio muy temprano en iniciada la primavera, que ha sido además muy voraz en su inicio”.
“Es cierto que los efectos del cambio climático son innegables, por lo que la perspectiva de la lucha contra los incendios debe plantearse de carácter anual”, añadió.
Los servicios de emergencia de la región informaron que realizaron tareas de desalojo en ocho localidades, incluso una residencia para ancianos en Montán.
Hasta la tarde del viernes, 18 aviones y helicópteros arrojaban agua y más de 500 bomberos y soldados participaban en las labores de combate al fuego, y el ejército español desplegó apoyo adicional para tratar de controlar las llamas.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) tuiteó que “las condiciones meteorológicas desfavorables, sobre todo teniendo en cuenta la fecha del año tan temprana, han sido las que han propiciado la rápida propagación del incendio forestal”. Las temperaturas rondaban los 25 Celsius (77 Fahrenheit) cuando estalló el incendio, y la humedad relativa cayó por debajo del 30% luego de un invierno particularmente seco en la región.
El riesgo de más incendios en Castellón el viernes era “extremo”.
El alcalde de una de las aldeas afectadas, Miguel Sandalinas, dijo que los árboles caídos que quedaron del invierno y el descuido general de la vegetación seca habían dado “mucha munición” al fuego.
En 2022, los incendios forestales arrasaron con 306.555 hectáreas de tierra en España, un área casi cuatro veces el tamaño de la ciudad de Nueva York, según datos de la Unión Europea.