LA HABANA (AP) — Una subasta de puros cubanos con la que se cerró el Festival del Habano, considerado uno de los eventos comerciales más importantes del sector en el país caribeño y que regresó a la presencialidad tras dos años de pandemia, superó los 11 millones de dólares, una cifra récord, según los organizadores.
La puja fue la culminación de la noche de gala de la edición XXIII del festival, que contó con la participación de unos 1.000 profesionales y aficionados al tabaco premiun de la isla, según constató The Associated Press.
Los cigarros torcidos a mano de la nación caribeña son considerados entre los mejores del mundo.
Los lotes en oferta fueron de vitolas de las marcas H. Upman, Hoyos de Monterey, Montecristo, Romeo y Julieta, Partagás y Cohiba. Al igual que en las ediciones pasadas, lo recaudado será donado a la salud pública cubana, según los organizadores.
En la cena gala estuvo presente el presidente Miguel Díaz-Canel y su esposa Lis Cuesta y precisamente el humidor —los cajones especiales normalmente de maderas preciosas y control de temperatura adonde se guardan los puros— de cifra más elevada en la subasta fue uno de Cohiba firmado por el mandatario.
La cifra total de la puja fue de 11,2 millones de euros (11,9 millones de dólares).
La organización corrió a cargo de la firma Habanos S.A, la empresa mixta con el monopolio de la comercialización de los puros cubanos en el mundo. La compañía —una asociación entre la estatal Cubatabaco y la ibero-británica Altadis— informó esta semana que había alcanzado ventas por 545 millones de dólares en 2022, principalmente en Europa, Asia y Cuba a raíz de una mejora en las llegadas de turistas a la isla, indicó.
Habanos S.A no tiene acceso al mercado estadounidense debido a las sanciones que Washington impone a la isla y que fueron reforzadas a partir del gobierno del entonces presidente Donald Trump.
En 2020, cuando se hizo el último festival anterior a la cuarentena por la pandemia de COVID-19, la subasta de la gala final alcanzó los 4,2 millones de euros, según los organizadores.
El festival comenzó el lunes e incluyó encuentros entre comercializadores y aficionados de todo el mundo; conferencias, visita a las vegas de tabaco y las fábricas de torcido. Además de artistas locales, la noche fue amenizada por un concierto del grupo alemán Beney M.