Por Kate Abnett
BRUSELAS, 5 dic (Reuters) - La Unión Europea intentará llegar a un acuerdo el lunes por la tarde sobre una ley que impida a las empresas vender en el mercado comunitario soja, carne de vacuno, café y otras materias primas relacionadas con la deforestación en todo el mundo.
Los negociadores de los distintos países miembro de la UE y el Parlamento Europeo esperan concluir las nuevas normas de diligencia debida, que obligarían a las empresas a demostrar que sus cadenas de suministro no contribuyen a la destrucción de los bosques, o a enfrentarse a multas.
"La UE está asumiendo la responsabilidad de sus propios patrones de consumo", declaró a Reuters el comisario de Medio Ambiente de la UE, Virginijus Sinkevicius, quien añadió que la legislación será "transformadora" para ayudar a frenar la deforestación mundial.
"La Unión Europea es responsable de alrededor del 10% de esta deforestación mundial a través de nuestro consumo de ciertos productos", dijo el negociador principal del Parlamento, Christophe Hansen.
La deforestación es una de las principales fuentes de emisión de gases de efecto invernadero, que impulsan el cambio climático. La UE espera que la ley refuerce su posición en la conferencia COP15 de la ONU que se celebra esta semana, en la que cerca de 200 países buscarán alcanzar un acuerdo global para proteger el mundo natural.
La ley propuesta se aplicaría a la soja, la carne de vacuno, el aceite de palma, la madera, el cacao y el café, y algunos productos derivados, como el cuero, el chocolate y los muebles. Los legisladores de la UE quieren añadir el caucho y el maíz.
La Comisión Europea, que elabora las propuestas de ley del bloque, propuso que 12 meses después de la entrada en vigor de la ley, las empresas más grandes que comercializan productos básicos en el mercado de la UE tendrían que demostrar que no se cultivaron en tierras deforestadas después de 2020. Las empresas más pequeñas deberán cumplirla al cabo de 24 meses.
Las empresas tendrían que presentar una declaración de diligencia debida, en la que se indicara cuándo y dónde se produjeron los productos básicos, así como información "verificable" de que están libres de deforestación.
El incumplimiento podría dar lugar a multas de hasta el 4% del volumen de negocios de una empresa en un país de la UE, y los países comunitarios deberán comprobar el cumplimiento
Algunos países han criticado el plan de la UE, y los embajadores de Brasil, Indonesia, Colombia y Malasia fueron algunos de los que escribieron a los dirigentes del bloque en julio, calificando las normas de "punitivas", gravosas y costosas para los países en vías de desarrollo.
Sinkevicius dijo que ha visitado o hablado con los Estados afectados por la ley, y que la UE trabajará con los países antes de la entrada en vigor de las normas para garantizar su aplicación.
El Parlamento Europeo y los países de la UE quieren alcanzar el compromiso de que el bloque también elaborará una estrategia a nivel comunitario para apoyar a los países productores a hacer frente a la deforestación. Esto no estaba en la propuesta original de la Comisión, y algunos representantes de la UE dijeron que no está claro si estará en el acuerdo final.
Julia Christian, del grupo activista Fern, dijo que el éxito de la ley dependerá de la colaboración con los países productores, así como de una mayor protección de los derechos de los pueblos indígenas.
"Estamos muy contentos de que se apruebe, pero necesitamos (...) utilizarla como punto de partida para una conversación más amplia", dijo.
(Reporte de Kate Abnett;e dición de Bernadette Baum; editado en español por Darío Fernández)