MOSCÚ (AP) — Moscú ha aplazado una ronda de conversaciones con Estados Unidos sobre el control de armas nucleares prevista para comenzar esta semana debido a diferencias de enfoque y las tensiones en torno a Ucrania, dijo un diplomático ruso el martes.
El vicecanciller Serguei Ryabkov informó que la decisión de aplazar las conversaciones que debían comenzar el martes en El Cairo fue tomada en el nivel político.
“Enfrentamos una situación en la que nuestros colegas estadounidenses no solo demostraron su renuencia a escuchar nuestras señales y tener en cuenta nuestras prioridades, sino que hicieron todo lo contrario”, dijo Ryabkov a la prensa en Moscú.
Ryabkov sostuvo que Estados Unidos quería enfocarse exclusivamente en reanudar las inspecciones bajo el tratado New START y bloqueó el pedido ruso de discutir cuestiones específicas relacionadas con el recuento de armas bajo el pacto de reducción de armas estratégicas.
El Departamento de Estado dijo el lunes que Moscú había decidido unilateralmente aplazar las conversaciones en El Cairo y que propondría nuevas fechas.
“Estados Unidos está dispuesto a reprogramar en la fecha más temprana posible, ya que reanudar las inspecciones es prioritario para sustentar el tratado como instrumento de estabilidad”, dijo el Departamento de Estado.
La reunión de la Comisión Consultora Bilateral creada bajo el New START prevista para esta semana hubiera sido la primera en más de un año. Se fijó la fecha con la intención de demostrar que los dos países siguen comprometidos con el control de armas y mantener abiertas las líneas de comunicación a pesar de las tensiones provocadas por la situación en Ucrania.
Rusia ha protestado por los envíos de armas occidentales a Ucrania. Ryabkov dijo que la situación en Ucrania era uno de los motivos de la decisión de Moscú de demorar las conversaciones.
“Naturalmente, los sucesos dentro y alrededor de Ucrania afectan esto”, indicó el vicecanciller. “El control de armas y el diálogo en este ámbito no puede ser inmune a lo que sucede alrededor y el panorama más amplio, que es bastante complicado y en gran medida inquietante, ha cumplido un papel”.
El tratado New START, firmado en 2010 por los presidentes Barack Obama y Dmitry Medvedev, limitan a cada país a un máximo de 1.550 ojivas nucleares instaladas y 700 misiles y bombarderos. El acuerdo prevé amplias inspecciones in situ para verificar el cumplimiento.