SAN SALVADOR (AP) — El presidente salvadoreño Nayib Bukele lanza por segunda vez una oferta a sus tenedores de deuda soberana para recomprar emisiones que vencen en 2023 y 2025 y que fueron colocadas por dos gobiernos anteriores, por 1.600 millones de dólares. La recompra será por hasta un máximo de 74 millones de dólares.
En primera operación, en septiembre pasado, adquirió 565 millones de dólares lo que dejó un remanente en esos dos bonos de deuda de 1.035 millones de dólares. Cada emisión, la que vence en 2023 y la de 2025, era de 800 millones de dólares.
Las dos convocatorias de recompra de deuda antes de su vencimiento coinciden con un contexto de fuertes señalamientos y desconfianza de los mercados de que el gobierno salvadoreño tenga suficiente liquidez para honrar el compromiso de pago más inmediato, que vence en enero de 2023. Es la primera vez que El Salvador recurre a una maniobra financiera así.
Esta segunda oferta de recompra de los bonos inició el martes con un anuncio del mandatario en su cuenta de Twitter y la liquidación ofrecida concluirá el 6 de diciembre.
Bukele afirmó: “La operación (de septiembre) fue tan exitosa, que hemos decidido lanzar OTRA OFERTA por el remanente de los bonos del 2023 y 2025. Siempre de manera pública, transparente y a los PRECIOS DE MERCADO en el momento de la recompra, que se hará en 8 semanas”.
En la operación de septiembre, los bonos con vencimiento en enero de 2023 recibieron ofertas por 179,49 millones de dólares. Finalmente, se aceptaron compras por 133,04 millones de dólares. Esa cifra cubría el 16,3% de los 800 millones de dólares de la emisión que se lanzó en el gobierno del entonces presidente Francisco Flores (1999 a 2004), de la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena).
Pero levantó más interés la emisión de bonos con vencimiento en 2025 al conseguir ofertas por 432,5 millones de dólares, lo que representa el 54% de los 800 millones de dólares de la deuda. Esa emisión fue colocada por el gobierno del entonces presidente Mauricio Funes (2009 a 2014), del izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
El Salvador también ha sido objeto de críticas de organismos financieros internacionales luego que adoptara el bitcoin como moneda de curso legal y de que hiciera una inversión en la criptomoneda por más de 106 millones de dólares de fondos públicos.
El Fondo Monetario Internacional recomendó a El Salvador eliminar el bitcoin como moneda de curso legal debido principalmente a su volatilidad y falta de regulación, pero el gobierno de Bukele desestimó la recomendación y anunció que emitirá bonos bitcoin.
Pese las críticas y la fuerte caída del bitcoin, el presidente Bukele anunció recientemente la compra de más unidades de la criptomoneda.
Desde que entró en vigor el uso de la criptomoneda se puso a disposición de los salvadoreños la billetera electrónica Chivo Wallet y el Congreso aprobó un fideicomiso para pagar un bono de 30 dólares para incentivar su uso. La billetera Chivo permite convertir las criptomonedas en dólares.