DOHA (AP) — Holanda está a punto de avanzar a los octavos de final del Mundial y es la absoluta favorita para su último partido del Grupo A contra la anfitriona, Qatar, el martes.
Si clasifican, la atención se centrará más en su técnico, Louis van Gaal, de 71 años, que hace poco más de un año abandonó su retiro para ocuparse de la selección mientras recibía tratamiento para un agresivo cáncer de próstata.
Qatar quedó fuera del torneo en la segunda jornada tras encajar dos derrotas.
A Holanda le basta el empate para avanzar y volver a meterse en la quiniela de favoritos tras su ausencia hace cuatro años. La derrota tampoco la mandaría a casa, siempre que Ecuador supere a Senegal en el otro choque del grupo.
En octavos se enfrentará a uno de los dos primeros del Grupo B, donde Inglaterra es la favorita e Irán, Gales y Estados Unidos se disputan el otro boleto.
Antes del torneo, Van Gaal afirmó que su equipo puede ganar el título, aunque pocos consideran que este sea uno de los mejores planteles holandeses.
Ninguna otra potencia futbolística ha acariciado tantas veces el título como Holanda, que atesora tres subcampeonatos: en 1974 contra Alemania Occidental, en 1978 frente a Argentina y en 2010 ante España.
En Brasil 2014 terminaron terceros tras caer en la tanda de penales con Argentina en las semifinales.
Tras varios años apartado del fútbol, Van Gaal abandonó su retiro para reemplazar a Frank de Boer en agosto de 2021. Dijo que lo hizo por obligación.
“Porque, sencillamente, no había nadie más disponible en ese momento”, afirmó el técnico.
Su valentía debe ser un motivador para los holandeses, pero también podría provocar a Qatar.
A principios de año, un franco Van Gaal dijo que era “ridículo” celebrar la Copa del Mundo en Qatar, un país de tres millones de habitantes. La basta riqueza del emirato está sustentada por el gas natural y el petróleo.
“Es ridículo que vayamos a jugar en un país para — ¿qué dice la FIFA? — desarrollar el fútbol allí", afirmó agregando que la nación es demasiado pequeña y carece de cultura futbolística.
“Pero no importa. Es una cuestión de dinero, de intereses comerciales. Eso es lo que le importa a la FIFA", añadió Van Gaal.