Ciudad Arce (El Salvador), 23 nov. El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, dijo este miércoles que "gracias a Dios" se está "ganando" la "guerra contra las pandillas", la cual tiene como medida principal un régimen de excepción que suspenden varios derechos constitucionales.
El Salvador se encuentra desde finales de marzo bajo un régimen de excepción, que cumplió 8 meses de vigencia, tras una ola de asesinatos que se cobró la vida de más de 80 personas en tres días.
"Ocho meses y gracias a Dios les estamos ganando (a las pandillas). De hecho, la estamos ganando de una manera que todos los expertos decían que era imposible (...) nadie creía que podíamos ganar la guerra contra las pandillas en tan solo unos meses, nadie", apuntó durante un evento en las afueras de San Salvador.
De acuerdo con Bukele, "esta es una victoria demasiado sorprendente que está ahí cerca y ha ocurrido así porque Dios así lo quiso. Que quede claro que la gloria es para Dios y que es de Dios".
"Nosotros, los seres humanos, tenemos la dicha de ser instrumentos de Dios para llevar paz, libertad y felicidad al pueblo salvadoreño", dijo y añadió que "somos el instrumento para salvar a esta tierra".
"Él (Dios) decidió hacerlo en este año y nosotros somos el instrumento para sanar esta tierra (...) para sanar, literalmente, el lugar más peligroso del mundo (...) ahora estamos camino hacer el país más seguro de todo el continente Americano", agregó.
El presidente Bukele anunció este miércoles que se implementarán "cercos en grandes ciudades" del país centroamericano para "extraer a los pandilleros que aún quedan" y continuar con la "guerra contra las pandillas".
Las pandillas, un fenómeno considerado como herencia de la guerra civil (1980-1992) que tomó fuerza con la deportación de pandilleros de Estados Unidos, han resistido a los planes de seguridad implementados en las últimas cuatro Administraciones. EFE
sa/enb